180 de los 285 consultorios rurales de Segovia siguen cerrados para la atención presencial

Mientras el mundo rural se mueve para que se escuche su reivindicación de una atención sanitaria «digna y de calidad», la Administración regional intenta «conciliar la demandas de los ciudadanos con el plan de actuaciones que ya se había transmitido a los municipios», ha explicado el delegado territorial de la Junta en Segovia, José Mazarías. Hasta ahora, ese encaje de las peticiones vecinales con la desescalada asistencial diseñada es «satisfactorio y no es descartable que se sumen nuevos consultorios al plan», subraya el responsable regional en la provincia.

No están tan de acuerdo en los pueblos que se sienten damnificados por la política sanitaria del Ejecutivo autonómico. De los 285 consultorios rurales que hay diseminados por la geografía segoviana, 180 siguen si ofrecer la demandada atención presencial al paciente, una reclamación efectuada incluso por los profesionales sanitarios. Antes de hoy eran muchos más los consultorios de pueblos que estaban en esta situación y no habían recibido aún las nuevas directrices.

Y es que, como ha expuesto el gerente de Asistencia Sanitaria de Segovia, Jorge Elizaga, la desescalada planteada en la Atención Primaria del medio rural «es dinámica y está abierta» a modificaciones. Es decir, cuando a principios de este mes se remitió una carta a los ayuntamientos para informarles de los planes de las autoridades sanitarias, se planteaba el horizonte temporal de octubre, «lo que no quiere decir que se tuviera la intención de cerrar todos los consultorios hasta entonces», ha matizado Elizaga.

La Junta de Castilla y León, a través del delegado territorial y del gerente de Asistencia Sanitaria, ha confirmado este miércoles un nuevo paso adelante en la desescalada sanitaria en la provincia, que se concreta en la vuelta al servicio presencial desde hoy de 85 de los 270 consultorios que no estaban activos a raíz de la pandemia, ya que quince ya os habían recuperado.

Además, Mazarías subraya que estas incorporaciones se suman a la red que conforman los dieciséis centros de salud que están operativos con su doble circuito para pacientes covid y no covid y se añaden a la reciente reapertura de los seis puntos de atención continuada para las guardias de urgencias en el ámbito rural: Aguilafuente, Turégano, Santa María la Real de Nieva, Ayllón, Boceguillas y Valverde del Majano, que suple temporalmente al punto existente en Bercial. En total, el primer nivel asistencial dispone a día de hoy más de 120 establecimientos distribuidos por el territorio segoviano.

En cuanto a los 180 centros que permanecen sin actividad sanitaria presencial, el delegado territorial apunta que «pertenecen a poblaciones pequeñas». José Mazarías hace hincapié en que «no hay consultorios cerrados» e insiste en que, si bien no están habilitados para la asistencia presencial al paciente por parte del médico, están cubiertos por medio de la atención telefónica.

En este sentido, recuerda el punto nueve del pacto por la recuperación económica y del empleo en Castilla y León, firmado por la inmensa mayoría de las fuerzas políticas. En él, se recoge la adaptación de la Atención Primaria a una nueva etapa y el avance hacia nuevos modelos. Así, destaca la apuesta por el triaje telefónico previo en el que el facultativo evalúa al paciente y determina si el usuario necesita acudir directamente al centro de salud o consultorio para recibir una asistencia presencial, o si el propio profesional se traslada al domicilio del paciente para la consulta.

Es decir, los usuarios pueden pedir cita previa con los equipos de su zona por los medios habituales, ya sea por teléfono, Internet, mediante la aplicación móvil Sacyl Conecta, o llamando al centro de salud de cabecera. De esta forma se evita que acuda directamente al consultorio hasta que el profesional sanitario no haya contactado con él por teléfono y será el médico el que le indique si es necesaria la atención presencial y en qué centro se llevará a cabo. Por su parte, las consultas en las que haya sospecha de un posible caso de coronavirus serán atendidas en el centro de salud de la zona.

Esta manera de funcionar se une a las medidas de protección que se han adoptado, como son la colocación de mamparas; el establecimiento de distancias de seguridad en las salas de espera de los centros de salud; el refuerzo de personal, sobre todo administrativo para gestionar el cribado telefónico; la disponibilidad de geles desinfectantes, etcétera. Una de esas actuaciones en los dieciséis centros de cabecera que concentran la atención es la habilitación de un doble circuito para pacientes sospechosos de covid y para el resto de usuarios.

La evolución en los planes de la desescalada sanitaria en el medio rural, y por tanto la reapertura para la asistencia presencial, está condicionada por tres criterios. Según ha especificado el delegado territorial, uno es la propia evolución epidemiológica de la pandemia de coronavirus en cuanto a contagios e incidencia; otro se centra en el seguimiento del funcionamiento del sistema puesto en marcha con el fin de adaptar necesidades de profesionales o de centros; y un tercero obedece a las posibilidades de contratación que puede hacer la Consejería de Sanidad para cubrir las vacaciones de los profesionales sanitarios, «a los que nadie puede negar esos días», ha apostillado Mazarías.