Las armerías anotan un repunte de más del 25% en el precio de la munición

La subida media en el precio en la munición es de un 25%, mientras que la ropa y otros artículos relacionados se han encarecido entre un 10% y 15%. En este último caso, el incremento «no se ha notado tanto, ya que se hace una programación y se compra mucho antes», explica Luis San Miguel, quien está al frente de la armería San Miguel de la capital segoviana. «El producto se da salida poco a poco y el golpe no se nota tan seguido», afirma, aunque vaticina que estos costes, en el futuro, también experimentarán un ascenso.

Respecto a los proyectiles, el aumento del precio ha sido notorio «por la escasez de materias primas», considera el vendedor. La carestía ha afectado a la munición metálica y, especialmente, a la cartuchería. «La caja de cartuchos empezó en 5,50 euros el año pasado y ahora está en 7,50», especifica. Las variaciones han tenido lugar de mes a mes. «Cada vez subían 40 céntimos más de media, lo que es muchísimo», matiza.

En esta misma línea se posiciona Roberto Benito, de la armería Prieto, también en la ciudad. En su caso, ejemplifica con los grandes cajones de 250 cartuchos, que están cerca de duplicar su valor. Cuando empezó a trabajar en este comercio hace tres años, su precio era de 43,90 euros, mientras que ahora supera los 72. «La munición de rifle también ha subido bastante, pero no llega a los niveles de los cartuchos de tiro al plato», continúa. Benito achaca esta situación específicamente al «monopolio» existente en España con este artículo. «La misma empresa es la que carga y fija los precios. No hay nada que hacer, ni se salvan los pequeños negocios», lamenta.

70euros es el precio medio a día de hoy de un cajón de 250 cartuchos, cuando hace dos años apenas superaba los 45.

Frente a ello, el consumidor intenta recortar los gastos y los vendedores son conscientes de ello. «Los clientes miran mucho la capacidad de ahorro y van a lo más barato», defiende el propietario de la armería San Miguel. No obstante, las marcas más económicas ahora están al mismo nivel en el que se ubicaban las más caras hace tan solo un año. «Una caja de cartuchos que solía costar 7,50 euros ahora vale 9; las más costosas se situaban en 11 euros y ahora rondan los 15», concreta.

«El consumo ha bajado», admite. Por su parte, el vendedor de la armería Prieto distingue entre los aficionados y las personas que están «dentro» del mundo del tiro al plato. «Estos últimos suelen tener un nivel adquisitivo bastante alto y van a seguir comprando», confía. Pero no todo acaba aquí. La necesidad del ahorro también se ha percibido en la renovación de armas. «Este año ha habido más reticencia a la hora de cambiar, lo hemos visto porque han entrado muchas menos escopetas de segunda mano», indica Benito.