La subdelegada afirma que no hay coincidencias en los dos supuestos intentos de rapto en Segovia

A veces, la línea que separa el bulo, las medidas verdades y la realidad puede ser extremadamente fina, sobre todo por la viralidad de algunas informaciones en las redes sociales, y por eso la subdelegada del Gobierno de Segovia, Pilar Sanz, hace un llamamiento a la calma para evitar que los dos supuestos casos de intento de secuestro de menores que se habrían producido en la provincia de Segovia en el último mes lleven a la población, y especialmente a los niños, a un estado de alarma e histeria colectiva. «Me gustaría pedir prudencia ante los mensajes de wasap que se mandan, es importante alertar, pero crear alarma social es peligroso, sobre todo porque se llega a sugestionar a los menores, que en este caso son los destinatarios».

Aunque los rumores de supuestos intentos de rapto de menores se han extendido en las últimas semanas por varias localidades de la provincia, lo cierto es que «son dos» las denuncias que están siendo investigadas por la Guardia Civil, subraya Sanz. Una fue interpuesta por la familia de un niño de Valverde del Majano, quien aseguró haber sido abordado por el conductor de un coche oscuro que le ofreció diez euros por subir al vehículo, y la segunda, la más reciente, la presentada por el padre de una niña de Espirdo que esperaba el autobús en Tizneros y que salió corriendo cuando un hombre habría intentado secuestrarla presuntamente tentándole también con dinero. De forma paralela a la investigación, se ha redoblado el dispositivo de seguridad, de carácter preventivo, que existe habitualmente en los entornos escolares, y Pilar Sanz recuerda que la colaboración ciudadana es absolutamente imprescindible. «Si alguien cree ver un vehículo sospechoso, que llame con prontitud», señala la subdelegada, quien recuerda que en el número 062, la Guardia Civil atiende directamente, las 24 horas del día.

«En este momento se están contrastando los datos facilitados por los dos menores, ambas versiones son coherentes pero no hay coincidencias en ellas», explica Pilar Sanz, quien precisa que «tampoco hay demasiados detalles, ni sobre los coches, ya que no se ha facilitado ninguna matrícula, ni sobre las características de los conductores». Por tanto, ahora mismo no hay sospechosos ni pistas físicas, subraya Sanz, quien explica que se están examinando las imágenes de las cámaras de vigilancia cercanas al lugar donde se produjo uno de los supuestos intentos de rapto, la zona que va desde el parque de arena a la plaza de Valverde.