Mogarraz: «La pandemia supuso un parón pero relanzó el turismo»

La pandemia del coronavirus fue un parón y un sinsentido, y nos hizo superdifícil gestionar los ayuntamientos durante ese tiempo. Sin embargo, relanzó el turismo, porque la gente acudió a los pueblos buscando aire, naturaleza... Y aquí en Mogarraz eso se notó. La pandemia, por otro lado, fue bastante benévola con nosotros, pues no tuvimos muertos ni hospitalizados por el virus. Pero sí podemos decir que institucionalmente fue difícil gestionarla, por lo que esta legislatura ha estado muy marcada por la misma.

Si pensamos en el futuro, para Mogarraz está en el turismo, pero me gustaría pensar que también en otros recursos y sectores, como por ejemplo el campo, que hoy está prácticamente abandonado, pero que puede significar un motor de desarrollo. El castaño –del que hemos dado un curso– podría ser un recurso a explotar, que permitiría un desarrollo laboral y también turístico como ocurre en otras zonas de Castilla y León, pues el mundo del campo ha evolucionado y no es tan duro como lo podía ser antes.

Si de proyectos hablamos, me gustaría recordar uno en el que llevamos tiempo trabajando para dar a conocer el pasado judío-sefardí de Mogarraz a través de la Red de Juderías de España–Caminos de Sefarad, que está formada por localidades que cuentan en sus conjuntos medievales con un patrimonio histórico, artístico, medioambiental y cultural, que es herencia de las comunidades judías que las habitaron.

Ello nos permitirá dar a conocer nuestra historia, nuestras raíces y a la vez convertirse en un motor económico para nuestros habitantes unido al resto de recursos con los que contamos, haciendo de Mogarraz un pueblo turístico por excelencia pero basado en nuestra historia, en nuestras raíces y también en nuestra cultura, un aspecto donde además tienen mucho que decir nuestras bordadoras -únicas en la Sierra de Francia- para la difusión de un BIC como es el bordado popular serrano.

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