La primera beca ‘Ángel Alonso’ impulsará una investigación en tumores sólidos

AbelJesús Martel ha sido el joven investigador seleccionado para recibir la primera beca ‘Ángel Alonso’, en la modalidad de contrato predoctoral, y que fue convocada a través del Instituto de Investigación Biomédica de Salamanca (IBSAL).

Detrás de esta beca hay una historia humana, la del fundador de la clínica odontológica Alonso, Ángel Alonso, que antes de fallecer como consecuencia de un cáncer quiso dejar un legado en forma de apuesta por la investigación. En su batalla estuvo acompañado en todo momento por su mujer,Rosa Pérez, que hizo entrega del diploma de la beca a Martel, graduado en Biología que se centrará en una investigación sobre la medicina personalizada en tumores sólidos, en cáncer de colon, cabeza y cuello. Este joven investigador manifestó sentirse muy agradecido porque reconoce que a los que finalizan su carrera o un posterior máster, «tenemos una piedra en el camino porque hay poca financiación y poca gente que aporte».

La beca está dotada con 18.500 euros para un año de duración. En el acto de entrega, el director médico del Complejo Asistencial de Salamanca, José Carlos Gómez, recordó que se trataba también de un homenaje a Ángel Alonso, «que lucho contra la enfermedad que tuvo que padecer». Por su parte, el oncólogo Emilio Fonseca, quien atendió a Alonso en la fase de su enfermedad, pronunció unas emotivas palabras sobre él:«Conocí al doctor Ángel Alonso en la etapa más dura de su enfermedad, en el momento en que la enfermedad vuelve a aparecer, como un mazo que cae sobre la cabeza, en un momento que te preguntas, ¿qué sucederá?, y se enfrentó a ello con mucha valentía y ganas de luchar», remarcó el doctor.

Asimismo, remarcó su carácter siempre colaborador, «dejándose llevar en las direcciones que fuera necesario tomar». Emilio Fonseca también precisó la gran profesionalidad del que ha promovido las becas que llevan su nombre, «que negociaba el día del tratamiento de su enfermedad porque no dejaba sus compromisos con los pacientes o para acudir a impartir esas clases fuera de la ciudad». Como también precisó, compartió con Alonso momentos duros, «y su huella en su familia y en los que le acompañamos siempre permanecerá entre nosotros como estímulo para seguir trabajando».