Recital del Real Valladolid Promesas en Zamora

Empezó mejor, no obstante, el Zamora. Manu Viana tuvo una doble ocasión en los primeros compases para el conjunto local: su primer disparo lo repelió Aceves con los pies y, en el rechace, el extremo local mandó el cuero por encima del larguero. Algo menos de diez minutos tardó en reaccionar el Promesas, y lo hizo merced a un zapatazo de Chuky desde 20 metros que se estrelló en el larguero. Esa ocasión fue el inicio del cambio de tendencia.

Precisamente, Chuky había sido amonestado en el minuto 6 por evitar un ataque prometedor. En el minuto 25, el filial blanquivioleta abrió el marcador. Cedric bajó a recibir, hizo una maniobra genial para zafarse de su marcador y Maroto colocó un pase en profundidad entre los centrales para dejar solo ante el portero a Arroyo, que no falló en la definición y colocó el 0-1.

A continuación, Lucas Rosa se retiró lesionado y le relevó Mikel Carro. El Zamora acusó el golpe y el Promesas lo aprovechó para anotar el segundo nueve minutos después. La escuadra dirigida por Julio Baptista robó en la frontal de su área y lanzó una contragolpe letal, con una velocidad endiablada de Diego Moreno, que culminó Chuky de remate en el corazón del área.

En los últimos instantes del primer tiempo, se contabilizó una ocasión por bando. Aceves frenó un disparo raso de Álex Ares desde la frontal e Iricibar detuvo un mano a mano ante Pozo.

El Zamora movió el banquillo nada más salir de vestuarios con la entrada de Sancho por Silva. Sin embargo, el Promesas no dejó lugar a dudas. A los tres minutos de la reanudación, Pozo enganchó un potente lanzamiento desde la frontal del área que sorprendió a Iricibar después de tocar en un defensor. Ahí, en el minuto 48, murió el partido, pues aunque el conjunto local intentó reaccionar haciendo un triple cambio, la realidad fue que el Valladolid Promesas jugó a placer y los locales prácticamente dimitieron de competir.

No es menos cierto que el Zamora tuvo ocasiones de maquillar el resultado, pero fue una noche en la que al conjunto local no le salió nada, y el Promesas interpretó bien cada momento del encuentro. De hecho, al contragolpe, con los locales volcados a la desesperada, el equipo de Julio Baptista redondeó la goleada por medio del revulsivo Canario, autor del 0-4 definitivo a pase de Diego Moreno en el minuto 87. El resultado mostró claramente las diferencias técnicas entre dos recién descendidos de Primera Federación.