El Real Valladolid tiene sus «armas para hacer daño al Zaragoza»
Paulo Pezzolano está contento con la evolución del juego y la implicación de sus jugadores en este inicio de liga
El Real Valladolid viaja por carretera este viernes a Zaragoza para disputar su segundo partido de liga en La Romareda (21:30 horas), donde se ... encontrarán a uno de los rivales históricos de Segunda y el único con más abonados que el Pucela esta temporada (más de 27.000). Los maños no pondrán las cosas sencillas al conjunto blanquivioleta, ya que «son un rival durísimo y han reforzado su plantilla muy rápido». No obstante, el cuerpo técnico de Paulo Pezzolano ha estado trabajando situaciones específicas para plantarle cara a uno de los gallos de la categoría y desenfundarán todas sus «armas porque sabemos donde podemos hacer daño».
La confianza es una de las claves para afrontar esta dura categoría y la primera victoria frente al Sporting «hizo que los chicos estuviesen más tranquilos». El técnico uruguayo sigue a la espera de nuevas incorporaciones que refuercen las zonas más débiles de la plantilla, pero se muestra «estoy contento con los jugadores que están participando, porque están trabajando bien y se están dejando la piel en el campo», valora Pezzolano. En las oficinas blanquivioletas existe la prisa por cerrar el plantel cuanto antes, aunque saben que «probablemente habrá que esperar a las últimas horas» del mercado para cerrarla.
Pese a la falta de efectivos en algunas zonas del campo, el juego del Pucela ha evolucionado notablemente en los últimos encuentros; aunque «aún podemos hacerlo mucho mejor con balón, porque tenemos la calidad suficiente para ello. Los chicos salen muy enchufados a los partidos y lo están haciendo todos muy bien», añade. Las grandes actuaciones de los jugadores del Promesas están sorprendiendo a la afición blanquivioleta y Pezzolano confía plenamente en ellos, ya que cree que el equipo tiene que aprender a defender y atacar en bloque para «no sufrir individualmente».
Asimismo, el papel de Escudero por la banda izquierda permite que el entrenador tenga una nueva variante de juego cuando está sobre el césped. «Escu tiene mucha calidad y finura para meterse por dentro y sus movimientos nos permiten sacar a los rivales de su posición. Nos fijamos mucho en las características de cada jugador y él lo hace muy bien ahí; si tuviésemos en el campo otro tipo de lateral más profundo, cambiaríamos ese aspecto del juego para adaptarnos a su estilo», explica.
Ausencias
El técnico blanquivioleta tiene a disposición para este encuentro a todos los jugadores que están ejercitándose durante los últimos días e, incluso podrían entrar en la convocatoria las dos nuevas incorporaciones Joni Montiel (ya entró frente al Sporting, pero no debutó) y Víctor Meseguer: «Ambos ya fueron presentados y están disponibles para mañana, veremos si participan o no; pero tienen mucha calidad y nos van a aportar mucho esta temporada», confirma al ser preguntado por los fichajes.
Por su parte, Javi Sanchez, David Torres y Anuar aún serán baja para este segundo partidos de liga debido a sus respectivas recuperaciones. «Los dos centrales están en la recta final de su lesión y en las próximas semanas podrían incorporarse al grupo, estamos viendo cómo lo toleran. Además, Anuar sigue cogiendo ritmo en los partidos amistosos del Promesas, porque viene de una lesión muy larga y queremos que esté al 100% cuando se incorpore a las convocatorias. Los tres estarán disponibles pronto», lamenta al hablar de las ausencias del partido.
El técnico uruguayo habló este jueves por la mañana sobre su sanción y la decisión institucional de responder únicamente con monosílabos en la rueda de prensa al finalizar el encuentro frente al Sporting: «El club optó por mostrar su desacuerdo con la decisión de La Liga de esa manera y yo estaba de acuerdo, lo importante es que creo que el mensaje que queríamos transmitir llegó perfectamente a los espectadores. A partir de ahora volverá a expresarme con normalidad, por respeto a la afición y sobre todo al trabajo de los medios de comunicación», concluyó muy serio Pezzolano.
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