La negociación entre Lalo Arantegui y el Real Valladolid se rompe con versiones enfrentadas

El hecho confirmado por las dos partes es el siguiente: Lalo Arantegui no será el próximo director deportivo del Real Valladolid. Las versiones que explican las causas difieren, como sucede en innumerables ocasiones cuando la cuerda de una negociación se rompe. Personas cercanas al propio Arantegui confirmaron a primera hora de la tarde de este viernes que el ex director deportivo de Huesca y Real Zaragoza había rechazado a lo largo de la mañana la propuesta del club blanquivioleta para ocupar ese mismo cargo en la nueva «revolución deportiva» que quiere implantar Ronaldo Nazário tras el descenso a Segunda División.

Según estas fuentes, el Real Valladolid presentó dos propuestas diferentes desde el pasado lunes, y tenía previsto enviar una tercera este viernes. Todas ellas fueron rechazadas por Lalo Arantegui, al que no acabaron de convencer las diferentes condiciones planteadas ni su papel en el nuevo organigrama de la entidad vallisoletana. El plazo marcado para cerrar un acuerdo entre las dos partes quedó fijado a las 14:00 horas de ayer. Antes de esa hora, y siempre según la versión del entorno del candidato, Arantegui ya avisó al Real Valladolid de que rechazaba cualquier propuesta de convertirse en director deportivo y que no seguiría negociando su posible incorporación.

Sin embargo, desde el estadio José Zorrilla surgió otra explicación muy diferente, una vez que El Norte adelantó la información en su web a las 14:29 horas bajo el titular 'Lalo Arantegui dice no al Real Valladolid', posteriormente matizado. Desde Zorrilla se transmitió la versión de que fue el propio club blanquivioleta el que, tras escuchar a Arantegui y a otros candidatos durante los últimos días, desestimó esta contratación para apostar por otros nombres y que así se lo hizo saber al propio interesado durante la mañana del viernes. «Nos gustan más otros candidatos», resumieron las fuentes consultadas en Zorrilla.

Esta versión sorprendió al propio Arantegui, según confirmaron personas próximas, que había considerado un «privilegio» que el Real Valladolid se fijara en él como director deportivo, pero que finalmente se decantó por no aceptar la oferta y se sintió dolido por la versión transmitida desde el club blanquivioleta durante la tarde. Por su parte, en el Real Valladolid se apuntó que, posiblemente, Arantegui intentó salir bien parado después de que su candidatura quedara descartada, una circunstancia que su entorno negó de manera vehemente. «Le están utilizando: fueron ellos los que fueron a por él. Al final, han demostrado poco estilo».

En cualquier caso, y más allá de las dos versiones enfrentadas, el Real Valladolid se quedó sin una de las opciones viables que contemplaba para ocupar el puesto vacante en la dirección deportiva tras el despido de Miguel Ángel Gómez, y tendrá que trabajar ahora para cerrar otra vía. Arantegui fue director deportivo de Huesca y Real Zaragoza, y actualmente trabaja para la empresa de representación Promoesport, que también ha estado al tanto de la negociación entre las dos partes.

La contratación del próximo director directivo del Real Valladolid no se cerrará, por tanto, de manera inminente, aunque podría quedar resuelta a lo largo de la próxima semana si se confirman las previsiones que se manejan en el seno del club blanquivioleta.

El proyecto deportivo del Real Valladolid se ve condicionado por la huella presidencialista que quiere imprimir el presidente del club, Ronaldo Nazário, y la creciente influencia de Paulo André, ex director deportivo del Atlético Paranaense y amigo de Ronaldo, que se perfila como una figura decisiva en el nuevo organigrama blanquivioleta, aún por definir, y en el que, seguro, no estará Lalo Arantegui.

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