Almada no da ni un respiro a los jugadores del Real Valladolid
El entrenador exprime a la plantilla con largas sesiones dobles y el equipo no ha disfrutado aún de una jornada de descanso
La exigencia resulta máxima en la pretemporada del Real Valladolid. La llegada de Guillermo Almada al banquillo blanquivioleta lleva aparejada un intenso trabajo de preparación ... en el que las piernas pesan cada vez más y los futbolistas apenas disponen de tiempo para recuperarse entre una sesión y otra. De hecho, el plantel no ha disfrutado de una sola jornada de descanso desde que comenzaron los entrenamientos el pasado 8 de julio a las órdenes del técnico uruguayo. En los últimos siete días se han programado doce sesiones, incluida la doble de este lunes, con sesión matinal en los Campos Anexos y vespertina en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas. Y la tendencia no parece frenarse porque, salvo cambio de planes, al partido de entrenamiento que el Real Valladolid jugará este martes en Las Rozas ante el Pafos FC chipriota le seguirá una nueva doble sesión el miércoles en Valladolid.
De estas doce sesiones, sólo dos han sido a puerta abierta, pero los más de doscientos aficionados que acudieron en la tarde del sábado a los Anexos pudieron comprobar cómo el nuevo entrenador no escatima en el tiempo de trabajo sobre el césped (los jugadores permanecieron más de dos horas sobre el verde). Y este lunes, ya a puerta cerrada, los futbolistas se encontraron para empezar con un duro circuito físico que comenzó a 9:00 horas y que se extendió durante los siguiente 45 minutos. Después, y tras sudar la gota gorda, llegó el entrenamiento con balón en los Campos Anexos, de nuevo con gran demanda del técnico uruguayo.
La pretemporada resulta tan dura para los jugadores que casi agradecen los días en los que únicamente se programa una única sesión. Sin embargo, esta circunstancia supone casi una rareza en este primer tramo de preparación: sólo ha sido así en la jornada inaugural del 8 de julio y el pasado domingo 13 (los dos entrenamientos superaron los 120 minutos). En cualquier caso, lo normal pasa por sesiones dobles de dos horas o más, a las que hay que añadir el trabajo anterior y posterior en el gimnasio.
El partido de entrenamiento de este martes ante el Pafos FC, campeón de la Liga chipriota, parece presentar cierto aroma de competición, ya que la expedición blanquivioleta se entrena y se concentra en Las Rozas antes de la primera prueba de la pretemporada, fijada para las 10:00 horas. Sin embargo, pocas conclusiones competitivas se podrán sacar de un amistoso a puerta cerrada en el que los jugadores del Real Valladolid acusarán la gran carga física acumulada durante la última semana frente a un rival que ultima su preparación con vistas a la fase previa de la Champions League. El Pafos FC juega el primero de los dos partidos de la eliminatoria ante el Maccabi Tel-Aviv el próximo martes 22 de julio y llega rodado tras haber disputado ya tres amistosos frente a AFC Wimbledon, Leyton Orient y Orlando Pirates.
En estos días de máxima intensidad se ha forjado una alianza entre el entrenador Guillermo Almada y el preparador físico Fran Albert, otro profesional exigente en su trabajo que ha vuelto a hacerse cargo directamente de esta parcela del equipo. Fran Albert llegó al Real Valladolid con Paco Herrera como entrenador (campaña 2016-2017) y siguió en los equipos de trabajo de Luis César Sampedro y Sergio González (curso 2017-2018), aunque salió del club tras el ascenso tras no llegar a un acuerdo para su continuidad como preparador físico del primer equipo. En 2023, y tras pasar por el Sporting de Gijón, retornó a la disciplina del Real Valladolid como responsable del Área de Rendimiento.
Almada aprovecha ahora los recursos de que dispone la entidad blanquivioleta. El técnico uruguayo ha llegado acompañado únicamente de Darwin Quintana como 'segundo'. Lejos del séquito de ayudantes que acompañan a otros entrenadores, Guillermo Almada trabaja con hombres de club como el propio Fran Albert en una parcela tan determinante como la preparación física. Otro ejemplo el de Sisi González, entrenador de cantera, incorporado al grupo de trabajo del charrúa tras solicitar un ayudante y valorar muy positivamente el nombre propuesto por el club blanquivioleta.
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