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La iglesia de San Miguel de la capital palentina permanece desde la semana pasada con la entrada principal, la puerta oeste que da al río Carrión, acordonada y precintaba desde los pivotes de piedra de la zona de acceso. El motivo es el desprendimiento que ... se ha producido recientemente de pequeñas piedras de la propia torre del templo. «Hemos tenido que tomar medidas de precaución por la caída de unas piedras», explicó este lunes el delegado de Patrimonio de la Diócesis de Palencia, José Luis Calvo Calleja.
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Esther Bengoechea
El cierre de la puerta principal, la que se sitúa de frente al puente de Isla Dos Aguas, no ha provocado mucha reorganización del culto, ya que esta entrada solo se suele abrir para eventos religiosos. «Estamos intentando solventar el problema y mirando cómo se puede intervenir la torre y cómo se puede sellar para que no haya más desprendimientos», continuó Calvo Calleja.
Hace unos meses, concretamente en mayo del año pasado, fue necesario intervenir en la puerta lateral o puerta sur, por la que suelen entrar todos los fieles, por la caída de unos pequeños trozos de la bóveda que está sobre el cancel o puerta de entrada de madera. Y en septiembre de 2023, cayeron dos pequeños trozos de revoco, la masa que une las propias piedras, en la nave lateral izquierda a la altura del retablo de la Virgen de la Salud como consecuencia de una gotera. En aquella ocasión, tampoco fue necesario cerrar la iglesia al culto mientras se llevó a cabo la obra de fijación de morteros.
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