Requisitos sanitarios limitan la presencia de ganado en la feria de La Pernía a terneros

Los terneros no han podido llegar acompañados de sus madres hasta San Salvador de Cantamuda este domingo. Y esto ha llenado de indignación a los ganaderos de la comarca y así lo han querido dejar bien claro a través de carteles y también de palabras. La Junta de Castilla y León les obligaba en esta edición a que los animales hubieran pasado la prueba de saneamiento para poder asistir a la feria.

Esto implica que debía haberse efectuado el test sanitario 30 días antes del evento. Unos requisitos que en La Pernía consideran improcedentes e injustos. «Hasta el 4 de agosto no nos han informado de las condiciones que tenía que tener la feria», explica Rubén García, alcalde del municipio, enfatizando que la normativa nunca antes había sido tan estricta y que esperaban la llegada de algún político para que les pudiera aclarar por qué se está actuando de esta manera. Políticas que, según todos los ganaderos clamaban, está perjudicando al desarrollo de la ganadería. Y allí estuvieron los criadores para alzar su voz. «La feria ha contado este año con más representación de la comarca que nunca, un total de 14 ganaderías llegadas de las 12 pedanías que forman el municipio», apuntó el regidor, resaltando que «los ganaderos sí que dan la cara».

La feria de ganado supone para la zona un gran reclamo turístico y a ella acude cada año un gran número de visitantes de toda la Montaña Palentina y también del sur de Cantabria que se acercan a ver los animales y pasan el día por estos atractivos pueblos de montaña. Igualmente, se trata de una productiva vía para que los ganaderos intercambien impresiones y negocien. «Nuestro objetivo es potenciar la feria, aunque sea con terneros también nos gusta, pero lo que está claro es que los ganaderos nos han respondido y los turistas también, más que los políticos que se han quedado en casa y no han venido a dar explicaciones», señaló Rubén García en clara alusión a la ausencia del delegado territorial de la Junta, presente en otras ediciones de la feria.

Asimismo, en La Pernía se sienten algo molestos con la Diputación de Palencia porque la subvención que se les otorga la institución provincial ha disminuido en los últimos años. «La ayuda de la Diputación antes en plena crisis era de casi el doble de lo que es ahora», manifestó García, anotando que antes la aportación era de 5.000 euros por las dos ferias (vacuna y caballar) y ahora es de 3.000 euros.

No obstante, la feria ha recibido el apoyo de algunos representantes políticos como el diputado provincial, Urbano Alonso, quien habló sobre la enorme importancia que tienen los ganaderos para el mantenimiento de los pueblos. «Desde Diputación apoyamos esta feria y también la del caballo económicamente y con nuestra presencia porque entendemos que es muy importante para esta zona donde el principal recurso es la ganadería y son ellos, los ganaderos, los que evitan la despoblación de la Montaña Palentina», recalcó Alonso.

También se ha acercado la diputada socialista por Palencia en el Congreso, María Luz Martínez Seijo, quien llegó acompañada del nuevo candidato del PSOE para la secretaría provincial, Agustín Martínez. Además, contó con más representantes municipales como la alcaldesa de Cervera, Kika Peña, y la portavoz del grupo popular en el ayuntamiento cerverano, Mariví Álvarez; y de otras instituciones como el gerente de ACD Montaña Palentina, Manuel Merino; y Domiciano Pastor, secretario provincial de UPA.

«A los ganaderos les deberían poner un monumento y no tantas trabas porque son ellos los que se ocupan del territorio; los que cuidan de la tierra, de sus animales, del oso, de los pueblos y de la gente», acentuaba Domi Pastor.

La Pernía cuenta en sus laderas con cuatro razas diferentes de vacas (Parda Alpina, Pirenaica, Charolesa y Limusina). Todas ellas productoras de carne, y de la mejor calidad. El mercado que contó con gran afluencia de público este domingo y concluyó con un homenaje póstumo a Francisco García ‘Paquines’, ganadero fallecido recientemente. Su familia ha recibido una placa concedida por el ayuntamiento.