La parroquia de Autilla del Pino recibe el tríptico de la Virgen de Chiquinquirá

La parroquia de Autilla del Pino recibió el domingo una obra de arte restaurada mediante el convenio 2016-2017 firmado entre la Diócesis y la Diputación de Palencia. La entrega y explicación de la obra se produjo al término de la misa dominical, en presencia de un elevado número de vecinos. El acto corrió a cargo de José Luis Calvo Calleja, delegado Diocesano de Patrimonio, con asistencia del cura párroco Marino Bravo Val; la alcaldesa de la localidad, María del Rosario Diez Rodríguez; Ramón Pérez de Castro, profesor de Arte de la Universidad de Valladolid; Antonio Rubio, de la Delegación Diocesana de Patrimonio, miembros del Consejo pastoral y vecinos del pueblo.

La obra entregada es un pequeño tríptico de madera aún sin identificar, probablemente de origen tropical dada su falta de contraste en los anillos de crecimiento, con veta regular y sin nudos. La caja alberga una pequeña tabla con marco dorado barroco, con pintura al óleo que representa a la Virgen de Chiquinquirá, patrona de Colombia, en el centro, con San Antonio de Padua a la izquierda y San Andrés a la derecha, ambos con sus símbolos habituales: san Antonio con hábito franciscano, capucha, cordón, libro y Niño Jesús con bola sobre él, y san Andrés con túnica blanca y capa roja, con la cruz en forma de aspa, instrumento de su martirio y un libro en su mano derecha. Es raro ver imágenes de San Antonio de Padua con la palma de mártir, ya que no lo fue. Se trata de una versión no muy acertada del símbolo de la virginidad que siempre son unas azucenas.

En las dos puertecillas hay otras cuatro pequeñas tablas, también enmarcadas con decoración sogueada, que representan: 'Descanso de la sagrada familia en su camino hacia Egipto', Santiago apóstol, patrono de España y Santa Bárbara, patrona de la artillería, al lado izquierdo. En la parte derecha, imagen superior, dos santos penitentes (uno franciscano y otro dominico) ante un crucificado. En la parte inferior, San Vicente Ferrer y San Francisco Javier, jesuita.

El tríptico de Autilla del Pino es una de las pocas obras de arte colonial que se conservan en la diócesis de Palencia, y posiblemente fue adquirida por algún miembro de la familia Ynguanzo, afincada en Cervera de Pisuerga desde el siglo XVI y emigrante a Latinoamérica. No se sabe a ciencia cierta, a día de hoy, cómo llegó a la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Autilla del Pino. Lo más probable es que se trate de algún regalo o donación del siglo XIX por alguien relacionado con esta familia, ya que en la parte posterior de la tabla central hay una inscripción que dice 'Es de Don Santiago Gómez Inguanzo'.