Igea reconoce en Palencia que hay «pocas esperanzas» de conseguir el toque de queda en Castilla y León
El vicepresidente regional no entiende que se aplique solo en algunas comunidades y pide a Gobierno y oposición que «no sigan en la barrera a la espera del tropiezo»
El vicepresidente, portavoz y consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, Francisco Igea, afirmó esta mañana en Palencia, uurante su participación en la mesa redonda 'Problemática y abordaje de las sujeciones. La voz de los expertos', dentro de la Jornada sobre Sujeciones celebrada en la Biblioteca, que no entiende las diferencias del toque de queda entre comunidades autónomas, al asegurar que «es muy difícil explicar esta situación a los españoles y es muy difícil explicar a los ciudadanos lo que es posible en una comunidad autónoma no lo es en la de al lado». Dejó claro que están a la espera de un informe de los servicios jurídicos de la Junta y reconoció que hay «pocas esperanzas» de conseguir el toque de queda en Castilla y León.
Igea preguntó tanto al Gobierno de España, a su delegado en la Comunidad, Javier Izquierdo, y al PSOE, si apoyarían esta medida personalmente o volverían a recurrirla. «Lo que no puede ser es que cuando nosotros planteamos esto aquí, el portavoz del Gobierno de España diga que esto es imposible, un portavoz de un Gobierno del mismo partido que los propugna en Valencia con una incidencia menor. Esto no lo entiende nadie«.
Por ello, repreguntó que si el Tribunal suspende esta medida volverán a pedir la dimisión. «Es el momento de que todos sumemos y tomemos responsabilidad de actuar conjuntamente ante la quinta ola». «Lo que no puede ser es que todo esté mal. El hacer y el no hacer. Todos tenemos que ser responsables, y nosotros vamos a ejercerla, porque el Gobierno no puede seguir en la barrera, y la oposición esperar al tropiezo«. Aclaró que es necesario saber »si les parece correcto y si lo van a apoyar o si van a recurrir«.
Además, aseguró estar «muy cansado de ver a gente poniendo en una balanza la vida de los ciudadanos y en otra su cuenta electoral», y dejó claro que «es absolutamente decepcionante». «Algunos aprovechan los incrementos de la incidencia para decir que estamos otra vez peor que nadie, pero no me importa, porque ya estoy un poco harto de los comentaristas de salón. Nuestro trabajo es intentar que, al final de año cuando esto pase, la mortalidad sea la menor posible y no estamos atentos a los comentaristas y especialistas que hay en esta Comunidad», afirmó.
Igea señaló a Ical que es necesario tomar medidas que «sean eficaces y consigan que la gente entienda que nadie está completamente a salvo«. Aun así, aclaró que »todo esto sería mucho mejor si viviéramos en un país en el cual el presidente del Gobierno saliera a dar las malas noticias, homogeneizase las decisiones o legislase«.
Vacunación
Por otro lado, explicó que es difícil alcanzar la inmunidad de rebaño si «el ritmo del suministro de dosis cae a la tercera parte», por ello puntualizó que espera que el Gobierno «haga lo necesario para que ese suministro permanezca estable, porque si se pasa de 600.000 a 200.000 es muy complicado». «Es una realidad a la que tampoco se ha dado respuesta, porque ayer Andalucía tuvo que parar la vacunación», añadió
«Si Castilla y León agota las dosis habrá que parar, porque hay que asegurar las segundas dosis, al ver que es muy importante que los ciudadanos estén vacunados con las dos dosis«. Por tanto, «si no se hace esto, lo que se haría es tirar las dosis e inmunizar de manera incompleta y no conseguir proteger a los que están en mayor riesgo, y esa es la obligación», apostilló Igea.
