La falta de obreros, los caros materiales y la lentitud de licencias empañan el auge del sector

Uno de los problemas más acuciantes es la demora en la concesión de licencias de obra para nuevas construcciones y derribos, un problema que continúa sin resolverse pese a la denuncia reiterada desde la asociación de constructores respecto a esta situación. «Seguimos esperando que se solucione el problema de las licencias. De momento, todo sigue más o menos igual», afirma Miguel Alonso. No obstante, desde la asociación esperan que el nuevo anuncio por parte del Ayuntamiento de Palencaia de que se van a incorporar tres nuevos arquitectos pueda agilizar el proceso y ajustarse al plazo legal de 90 días. Un cambio que supondría una mejora significativa frente a los retrasos actuales, que en casi todos los casos superan el año de espera, argumenta Miguel Alonso.

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La escasez de mano de obra es otro gran desafío. «Desde la crisis, mucha gente salió del sector y no ha vuelto», explica Miguel Alonso. Una 'huida' de trabajadores rumbo a otros sectores que ha generado una falta de personal especializado, y a esto se suma la subida de los costes de los materiales, que en algunos casos se han triplicado.

Pese a estas dificultades, el sector en Palencia muestra signos de crecimiento y sigue siendo atractivo para la inversión. Proyectos como el centro logístico de 50.000 metros cuadrados en el polígono de Magaz y la nueva fábrica de copos de avena que levanta el grupo alimentario Agropal en este enclave industrial «reflejan el interés empresarial por la provincia». Además, se prevé una mayor demanda de vivienda, impulsada por la llegada de la alta velocidad ferroviaria y la tendencia a buscar ciudades más asequibles para vivir. «Tanto en empresas privadas como en obra pública se está invirtiendo bastante, de hecho, somos una de las provincias a nivel regional donde más se ha invertido, superados solo por Valladolid y Burgos», subraya el presidente de Aecopa.

En el ámbito de la obra pública, la modernización del regadío del bajo Carrión ha recibido una inversión de 50 millones de euros por parte del Ministerio de Agricultura. La Diputación también ha lanzado una apuesta por la vivienda, destinando 10 millones de euros adicionales a reformas y nuevas construcciones. Sin embargo, el sector señala que el Ayuntamiento de Palencia y la Junta de Castilla y León han realizado menores aportaciones en comparación con su capacidad presupuestaria. «El Ayuntamiento ha invertido 4 millones de euros en obra pública, mientras la Diputación ha invertido 36,9 millones de euros, un 15% del total autonómico, durante el año pasado. La Diputación este año sigue apostando por la vivienda, va a reformar y crear bastante vivienda, además de invertir 10 millones de euros adicionales en este aspecto», expone Miguel Alonso.

El futuro de la construcción en Palencia se encuentra en un momento clave, también con avances tecnológicos que están transformando la manera de edificar. «Siempre me gusta decir que se está pasando de la tecnología del ladrillo a la del tornillo. La tecnología está avanzando a una velocidad que muchas veces en el sector no somos capaces de seguirle el paso. A pesar de todo, se va viendo poco a poco todos estos avances en las construcciones actuales», concluye Alonso, en referencia a la incorporación de nuevos materiales y sistemas que mejoran la eficiencia energética y el aislamiento de las viviendas.