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Los más pequeños trabajan en la construcción de bloques. Antonio Quintero

El colegio público Marqués de Santillana trabaja con la música como hilo conductor

El centro, uno de los pioneros en el bilingüismo, está especializado en la atención a la diversidad y en alumnos con necesidades especiales

j. olano

Palencia

Lunes, 6 de noviembre 2017

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La sensación de entrar en el mundo de los sueños que el colegio Marqués de Santillana quiere infundir cuando alumnos, profesores y familias atraviesan su puerta de entrada, y que el centro quiso trasladar a la Reina Doña Letizia en septiembre de 2015 siguen siendo válidas dos cursos después, porque en el centro mantienen la satisfacción y la ilusión que dejó la estela real. Comparten ese sueño, el que cada día inunda el trabajo del equipo docente, volcado este curso más si cabe en el aprendizaje cooperativo y la metodología en proyectos. Los profesores están recibiendo formación específica en estos métodos a través del Centro de Formación e Innovación Educativa de la Dirección Provincial de Educación.

Además, el colegio Marqués de Santillana, con 208 alumnos en este curso, es uno de los tres de Palencia (junto al Castilla y León de Aguilar y a La Piedad de Herrera de Pisuerga) en contar con la categoría BITS (centros bilingües, inclusivos, tecnológicos y seguros), una red de centros educativos innovadores que contribuye al mejor y mayor desarrollo de las competencias clave de los alumnos para el futuro, según recoge la apuesta de la Consejería de Educación de la Junta.

El trabajo para erradicar la violencia de género y todo tipo de violencia está también presente en el día a día del colegio, que ya alberga un rincón que se dedicará a la conmemoración del próximo 25 de noviembre, una celebración compartida en fecha y hora (el día 23, al ser el 25 domingo)por otros centros de la región. Ese rincón ya se está decorando en el colegio Marqués de Santillana junto a unas escaleras con retazos de poemas de Neruda en cada peldaño.

El colegio también tiene un huerto en el patio –con el espantapájaros Deo– como baluarte también del trabajo sobre la sostenibilidad que desarrollan en las aulas. El medio ambiente ha sido el hilo conductor de la educación transversal que reciben los alumnos, por lo que la responsabilidad del colegio con el planeta va más allá de las buenas intenciones, se traduce en el huerto ecológico y en otras actividades.

Pero el medio ambiente ha dado paso este curso a la música, y el colegio canta al son del Marqués de Santillana, que se expresa en el mural de la entrada como presentación del trabajo en este centro –situado en el barrio del Carmen, cerca de la Fábrica de Armas–, caracterizado por la atención a la diversidad, a minorías étnicas y a alumnos con necesidades educativas especiales, además de ser uno de los primeros que implantó la enseñanza bilingüe.

Y este curso aprenderán al son del marqués de Santillana, nombre por el que es conocido Íñigo López de Mendoza (Carrión de los Condes, 1398. Guadalajara, 1458), militar y poeta español del Prerrenacimiento, tío del también poeta Gómez Manrique y emparentado también con los poetas Jorge Manrique y Garcilaso de la Vega.

Con la figura del Marqués de Santillana de fondo, escolares y profesores están inmersos en un nuevo curso plagado también de sueños, algunos tan reales como su realidad educativa.

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