Acepta tres años de prisión por tenencia y distribución de material pedófilo en Internet
R. G. C. reconoce los hechos y llega a un acuerdo con la Fiscalía, que pedía en principio para él una pena de cuatro años de cárcel
Un hombre R. G. C., asumió este jueves una pena de tres años y un día de cárcel y cinco de libertad vigilada a cumplir con posterioridad a la pena privativa de libertad por un delito de corrupción de menores, tenencia y distribución de material pedófilo, después del acuerdo al que llegó en el Juzgado de lo Penal de Palencia con la Fiscalía, que solicitaba inicialmente para él una pena de cuatro años de prisión y cinco de libertad vigilada.
R. G. C. reconoció unos hechos que se remontan a los primeros meses de 2020, cuando la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Comisaría de Palencia inició una investigación sobre distribución de material pornográfico infantil en la red, en colaboración con la Unidad Central de la Comisaría General de Policía Judicial, en el seno de la 'operación Antifaz', dirigida al esclarecimiento de delitos relativos a la distribución de pornografía infantil a través de la red social Facebook.
En el seno de dicha investigación, se recibió un informe emitido el National Center of Missing & Exploited Children (NCMEC) en el que se aportaba información sobre un usuario de Facebook que, desde una dirección de correo electrónico, descargaba y suministraba material pedófilo, habiendo enviado a Santiago de Chile y Tegucigalpa, a jóvenes menores de edad, sendos vídeos con contenido pornográfico obtenidos en la red, reflejando a otros menores realizando comportamientos sexuales explícitos como masturbaciones y felaciones.
Igualmente, los días 6 de abril, 7 de agosto, 14 de septiembre y 29 de noviembre de 2019 y el 20 de enero de 2020, desde diferentes IP y a distintas horas, R. G. C. descargó dicho material, no constando que participara en su elaboración.
R. G. C. asumió también cinco años de libertad vigilada a cumplir con posterioridad a la pena privativa de libertad
Del resultado de la investigación policial se constató que, entre los meses de enero y noviembre de 2019, desde teléfonos vinculados al acusado, se verificaron por este conexiones a Facebook de idéntico contenido, por lo que el 14 de agosto de 2020 se practicó una entrada y registro en el domicilio del acusado en una localidad del norte de la provincia. En dicho registro se intervino un teléfono móvil, una tarjeta SIM y una memoria, así como una agenda y un cuaderno de anotaciones y dos documentos acreditativos de envíos de dinero a través de la agencia Western Union.
Tras un examen 'in situ' del móvil, se observó la existencia de un importante número de perfiles de contacto con varones menores de edad. En muchas de las imágenes asociadas a dichos perfiles aparecían menores con el torso desnudo y en posturas sugerentes, no conservando conversaciones con los mismos. En la galería de imágenes se observaron fotografías de menores vestidos o con el torso desnudo, así como un vídeo en el que aparecía la grabación de un menor mientras se duchaba y un archivo en el que se observaba a un menor desnudo.
Efectuado el volcado del teléfono, se encontraron un total de 228 fotos de menores (algunos desnudos) y algunas de ellas con imágenes de sexo explícito, así como tres archivos en formato vídeo con contenido pedófilo, con menores desnudos, uno de ellos mientras se duchaba.
R. G. C. ya fue condenado por un delito de corrupción de menores (difusión de material pornográfico entre menores) en sentencia firme a un año de cárcel, pena que fue suspendida por cuatro años desde el 29 de mayo de 2017.
