Trump contra España

A un año vista de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, Donald Trump se perfila como el favorito a repetir en el despacho oval. Malas noticias para España. El payaso americano ya ha aplicado aranceles del 25% a nuestras aceitunas de mesa, al aceite y al vino, lo que constituye un golpe en la médula espinal de nuestros campos. Según él, Airbus, el consorcio europeo del que formamos parte, es el culpable. Lo justifica por el hecho de que la empresa ha recibido ayudas de los gobiernos español, británico, francés y alemán, lo que ha perjudicado al gigante de la aviación estadounidense Boeing. De momento, la peor parte del castigo se la lleva España. Italia no forma parte de Airbus, de modo que podrán colocar sus vinos y 'su' aceite a precios competitivos. (Entrecomillo 'su' porque una parte significativa de las exportaciones de ese oro líquido la adquieren a aceiteros de nuestro país y la etiquetan como producto italiano. Paradojas de la vida).

Hace unos días la agencia de noticias 'Bloomberg' publicó que la Administración Trump prevé aplicar sanciones a España por una supuesta colaboración del Banco de España con Nicolás Maduro y su banco central, socavando las que Trump puso en marcha contra Venezuela. Exteriores ha desmentido que se haya cometido semejante perversión y fuentes de la casa han asegurado que se trata de una «filtración interesada» (?).

No se puede doblar el brazo del gigante americano, así que nuestros agricultores están pidiendo a gritos una rogativa, no para que llueva (que también), sino para que caiga del cielo el próximo noviembre de 2020 un presidente demócrata que restablezca la sensatez en la acción exterior de Estados Unidos con sus socios y aliados. Pero reina la incertidumbre y los presagios no son nada halagüeños, porque el PD carece de un candidato que proyecte un liderazgo esperanzador.