Promesas y más promesas
«Están ahí para todo y para todos, incluso salvaguardando a aquellos que muchas veces les increpan»
El refranero español es sabio y docto, y por desgracia las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han vivido esta semana en sus propias ... carnes aquello de «prometer hasta meter, y una vez metido se acabó lo prometido». El Gobierno de Pedro Sánchez y compañía ha vetado la iniciativa legislativa popular que pide la equiparación salarial, después de que ellos públicamente lo hayan apoyado en numerosos mítines, entrevistas, preguntas por la calle, etc. Pero parece que su palabra no importa una vez que tienen el voto.
Me hace gracia que el Gobierno que hoy representa a España, es decir, a todos los españoles (por si se les olvida) declare que no hay dinero para dicha equiparación, cuando acaba de subir el techo de gasto para los próximos dos años. ¿Adónde van a ir esas partidas? ¿Adónde mandábamos a nuestros policías a defender las calles y la seguridad de los españoles en medio de batallas campales jamás vistas en la historia de nuestra democracia? A ver si nos aclaramos. Yo entiendo que supone mucho dinero equiparar el sueldo a los policías y guardias civiles de toda España, ¿pero por qué unos merecen más que otros?
Gracias precisamente a ellos, a los que lucharon durante años siendo también víctimas y objetivos principales de las bandas terroristas, ya no vivimos en el país en el que la criminalidad o la peligrosidad son un plus añadido en algunas comunidades autónomas. Entonces, ¿no se merecen todos lo mismo? Pues parece ser que no. Pero eso no preocupa a nuestros políticos a la hora de llamarles para que velen y vigilen por su seguridad en las puertas de la Moncloa o en el chalet de Galapagar.
No sé si somos conscientes del trabajo y el esfuerzo de estas personas que se levantan cada día para estar en ese lugar del que ustedes y yo saldríamos huyendo, que hacen que nuestros derechos y libertades se vean intactos, poniendo en peligro su propia vida en algunas ocasiones. Están ahí para todo y para todos, incluso salvaguardando a aquellos que muchas veces les increpan.
Por eso, desde aquí quiero darles las gracias a todos ellos, por algo son las instituciones mejores valoradas por los ciudadanos, porque con ellos nos sentimos seguros y ahora nos toca a nosotros devolverles la ayuda con nuestro apoyo, pero de verdad, no con promesas incumplidas. Hagamos que nuestra palabra sí tenga validez, a ver si entre todos logramos que la justicia exista también para ellos. Pero ya saben esta es solo mi opinión, sea usted crítico y libre de opinar.
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