De baja por menstruación
Editorial ·
La endometriosis representa un problema de salud pública que no puede convertirse en un factor de discriminación para las mujeresEl establecimiento de bajas laborales específicas por menstruaciones muy dolorosas e incapacitantes ha dividido al Gobierno de Pedro Sánchez, además de suscitar posiciones dispares entre CC OO y UGT, ante el riesgo de que pudiera estigmatizar a las mujeres y suponer un obstáculo añadido para su contratación. La fórmula de compromiso acordada ayer entre los ministros del PSOE y de Unidas Podemos aminora el segundo de esos peligros al endosar al Estado el coste íntegro de la medida, cuya aprobación y duración será determinada por el médico en cada caso, frente al periodo de entre tres y cinco días previsto inicialmente en el borrador de Igualdad.
La endometriosis representa un problema de salud pública que no puede convertirse en un factor de discriminación para las mujeres. El derecho a la baja laboral de quienes la sufren ya existía, es tan inobjetable como el de las personas afectadas por otras dolencias y no debiera ser objeto de discusión. Si sirve para blindarlo su inclusión en la reforma de la ley del aborto, bienvenida sea aunque la operación no parece ajena al marketing político y, pese al arreglo de última hora, ha vuelto a demostrar la descoordinación en el Gobierno.