Los autos locos
La aventura humana ·
Se hace cuesta arriba asumir que teniendo los papeles en regla, pagados los impuestos y no estar inhabilitado para la conducción impida a alguien acceder a las zonas guays de las ciudadesSalvo en su propia continuidad, el político no suele creer en nada que merezca la pena. Tan solo presta sus oídos a las tendencias por ... su propio interés, y el advenimiento ecológico lo es. Así que se pone manos a la obra y legisla al tuntún. Sin ir más lejos y como otros, el Ayuntamiento pucelano ha decidido restringir el acceso de ciertos vehículos a determinadas calles, como si los gases nocivos entendieran de fronteras. Parece legal, pero démosle tiempo. Impedir el paso a un utilitario por 'cojonismo' podría vulnerar prerrogativas constitucionales, como, por ejemplo, el derecho a la libre circulación de personas. Se hace cuesta arriba asumir que teniendo los papeles en regla, pagados los impuestos y no estar inhabilitado para la conducción impida a alguien acceder a las zonas guays de las ciudades. Salvo que el Estado compre coches nuevos para todos, y no parece que esto vaya a suceder.
Otra medida de la que muchos ayuntamientos ya están renegando es la reducción del límite de velocidad. Por lógica, conducir a velocidad reducida contamina más. Por temor a las multas, los conductores miran más el cuentakilómetros que lo que tienen al otro lado del cristal, con el riesgo que esto supone. Además, muchos munícipes han comprobado que aumenta el número de atascos, con el consiguiente aumento de la combustión. De ahí que Ponferrada, San Sebastián y cada vez más hayan concluido que hicieron un mal negocio con esta vertiente pseudo ecológica. Pero siempre prevalecerán los privilegios, así que los residentes podrán contaminar en zonas restringidas y la policía, también. Salvo que a unos y a otros las administraciones les regalen autos nuevos. En cuanto a usted, siéntese a esperar. O hágase Pierre Nodoyuna y sáltese las normas… o yo qué sé.
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