Público informado, primeras ventas y expectativas altas en la inauguración de la FIVA

El sector inmobiliario se encuentra en un momento de reflexión, en el que la situación económica hace que el cliente potencial estudie más que nunca sus opciones y sus necesidades. Así lo hizo aquel que acudió a la inauguración de la Feria Inmobiliaria de primavera de Valladolid, dando prioridad al estudio de sus posibilidades a la hora de sentarse con los expositores que se dan cita en la Cúpula del Milenio. Lo que no quiere decir que no haya compra; la hay y la hubo en las primeras horas, como confirmaba Cristina Sáez, comercial de Vía Célere, después de sellar la primera.

Y es que, como afirmaba en la puesta de largo Manuel Saravia, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Valladolid, «aquí está expuesto prácticamente todo lo nuevo que se está construyendo, con altas calidades y características», algo que conoce por regla general el visitante, que muchas veces llega sabiendo lo que quiere y queriendo saber más sobre algo a lo que, quizá, le había echado ya el ojo. «Nos gusta que tengan interés por nuestras características y que vengan con la idea de saber más y de verlo aquí», explicaba Almudena Guerra, directora territorial de Vía Célere, una de las firmas que se 'estrenaron' en la primera jornada. El ánimo y la ilusión de las primeras horas era compartido por María Frías, de Raimconsa, que mostraba su deseo «de poder aclarar todas las dudas que los visitantes puedan tener» y mostraba unas «expectativas altas» en poder hacerlo.

Sergio Ruiz de Gauna, responsable de Ker 2000, aguarda «que la demanda acompañe a lo largo del fin de semana, como, viene sucediendo actualmente» y sucedió desde las primeras horas. «Hay varias promociones nuevas y esperamos que las novedades atraigan clientes», añadió.

«Hay mucha diversidad en las promociones y creo que eso va a permitir que venga más gente. Tenemos unas expectativas altas y somos optimistas», confirma Cristóbal Autrán, responsable de Profal, una de las empresas que presentan una nueva promoción en esta feria, deseoso de que el ritmo de visitantes sea incluso mayor de lo que lo fue durante la jornada del viernes.

Si en la variedad está el gusto, en el gusto del cliente de la FIVA está, a poder ser, «que la obra esté iniciada», destaca Gonzalo Jolín, representante de Engels&Völkers. «Una de las cosas que buscan es la confianza en el constructor y en el promotor», que aumenta en estos casos, si bien en esta FIVA todas las empresas presentes, ya hayan comenzado sus obras o no, tienen músculo suficiente como para ofrecer esa confianza dentro del mercado. Buscando reforzarlos, varias son las empresas que ofrecen facilidades de pago, tal y como hace Norforest, facilitando que el cliente pueda, durante dos años, solamente pagar un 1% de los intereses de su hipoteca, «en una apuesta fuerte por seguir vendiendo producto en Valladolid», asevera José Antonio Cobo, su director general. De igual modo actúan otras promotoras como Villas Norte, que también ofrece «facilidades de pago en obra nueva», expone Paz Rodríguez, su representante.

El público de esta feria es diverso; va desde quien busca su primera vivienda, hasta el que quiera ampliar el espacio del que dispone, pasando por inversores que se puedan ver atraídos por un valor que se considera seguro. Así lo hace Félix Frías, responsable de Pryconsa, que cree que, en la situación económica actual «puede ser buen momento para volver a mirar al mundo inmobiliario para invertir en un valor tangible» que se podrá seguir estudiando durante el fin de semana.

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