Andalucía castellana
Otra mirada ·
«Nunca antes unas elecciones autonómicas tan distantes se habían seguido tan de cerca»QUICO CHIRINO
Miércoles, 2 de febrero 2022, 00:31
Quizás algunos andaluces ni siquiera hayan reparado en que la uva del vino que beben se recolecta al sur de Burgos, pero esos mismos andaluces ... probablemente sepan que el presidente de Castilla y León se llama Alfonso Fernández Mañueco; aunque, a buen seguro, les guste más el vino que la política. Nunca antes unas elecciones autonómicas tan distantes se habían seguido tan de cerca. Porque tampoco hasta ahora el futuro inmediato de Andalucía había dependido -ni mucho ni poco- de lo que voten los castellanos y leoneses.
La voluntad manifiesta de Juanma Moreno es estirar la legislatura hasta final de año. No es solo lo que declara; es lo que quiere y lo que piensa. Sin embargo, cuanto más repite el mensaje, más se pone bajo sospecha.
La decisión de convocar elecciones corresponde a Moreno, pero no solo depende de él. Hay dos condicionantes externos. El primero, un previsible bloqueo en el Parlamento cuando se retome en febrero el periodo de sesiones. Vox hace tiempo que entró en modo preelectoral y le ha retirado -según el día- su apoyo. La candidata -aún oficiosa- será Macarena Olona, y este es uno de los motivos por los que Moreno no ha disuelto ya el Parlamento pese a la victoria holgada que le vaticinan las encuestas; quizás bajo la esperanza de que el tiempo propicie la resurrección de Ciudadanos y le evite tener que meter a Vox en San Telmo, que así se llama la sede del gobierno andaluz. Los milagros existen en política, pero es raro que sucedan dos veces seguidas.
El segundo motivo por el que Juanma Moreno no controla en realidad el epílogo de su legislatura es el efervescente contexto nacional. Una nueva debacle electoral de Ciudadanos en Castilla y León lo precipitará todo. Y entonces, puede que sí haya adelanto electoral en Andalucía.
Aprovechando que el Pisuerga pasa por San Telmo.
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