Destinar fondos para conseguir una Segovia accesible

El cuarto bloque abordó el debate y las propuestas de los partidos políticos en torno a una cuestión muy sensible: los servicios sociales. Clara Luquero, candidata del PSOE a revalidar el gobierno municipal, subrayó su intención de seguir haciendo de Segovia una ciudad igualitaria, «de todos y de todas». La actual alcaldesa prometió construir vivienda protegida, aumentar el número de viviendas sociales, incrementar las ayudas del ámbito sociosanitario, mejorar la contratación pública con economía social, fomentar la igualdad de hombres y mujeres («ser feminista es defender que los hombres y las mujeres somos iguales en derechos y deberes», dijo), erradicar la publicidad sexista de las calles, elaborar un mapa del miedo para localizar aquellas zonas que las mujeres perciben como inseguras, reforzar los programas de empleo destinados a mujeres en riesgo de exclusión social y mejorar la atención a los mayores con programas muy definidos, como el llamado Al médico contigo.

Aunque defendió que cada obra que se acomete en la ciudad lleva implícita una apuesta por la accesibilidad, la alcaldesa encontró en esta materia réplica en PP y Ciudadanos. Populares y naranjas reprocharon a la regidora no haber empleado los recursos suficientes en la eliminación de barreras arquitectónicas y en hacer de Segovia una ciudad verdaderamente accesible. El candidato del PP prometió destinar 2 millones de euros a esta cuestión. «Somos conscientes de las barreras y limitaciones que hay y, desde luego, vamos a invertir al menos 2 millones en accesibilidad, si recibimos el apoyo de los segovianos. El Ayuntamiento de Clara Luquero ha estado destinando solo 25.000 euros desde 2015, y este año, que se habían dotado 200.000, tampoco han sido capaces de ejecutar toda la partida. Sin duda, el equipo de gobierno no ve barreras arquitectónicas en la ciudad como para poder ejecutar los 200.000 euros presupuestados», dijo Pablo Pérez, que prometió la creación de un centro de urgencia social –para la atención de mujeres víctimas de la violencia de género y personas sin recursos–, la reforma del centro de servicio sociales Jesús Mazariegos, en La Albuera, y el fomento de programas de convivencia entre personas mayores y estudiantes.

La candidata de Cs, Noemí Otero, atribuyó a la presión de su partido el incremento de la cantidad que el Ayuntamiento de Segovia venía destinando anualmente a accesibilidad, «pero hay que invertir más de 200.000 euros», dijo. Otero se mostró partidaria de regenerar zonas como el Lago Alonso, en Nueva Segovia, y la Alameda del Parral, aumentar el número de instalaciones para deporte y tiempo libre, fomentar el voluntariado para promover proyectos intergeneracionales que ayuden al envejecimiento activo y luchar contra el acoso escolar, entre otras medidas.

Cosme Aranguren, el aspirante de Centrados a la Alcaldía, reivindicó más financiación en materia de servicios sociales. «Esto, o que la Junta de Castilla y León asuma más competencias», aseveró. Centrados pretende dotar de más presupuesto a la Ley de Dependencia y de acometer, de una vez por todas, infraestructuras sociosanitarias muy necesarias para la ciudad, como el centro de salud Segovia IV o la rehabilitación de la antigua policlínica 18 de Julio para las estancias medias. Aranguren prometió más medios para la Policía Local y reducir la eventualidad de los trabajadores. Ángel Galindo se posicionó a favor de que el Ayuntamiento de Segovia gestione directamente los servicios sociales para garantizar su calidad y evitar dejarlos en manos de empresas que, según dijo, hay que controlar. También defendió IU el uso de la vieja policlínica como hospital de estancias medias, medidas para incrementar la accesibilidad y la creación de plazas de guardería.

Los cinco candidatos expresaron la «sensibilidad» que sus equipos tienen en una materia, los servicios sociales, que se erige como pieza fundamental del estado de bienestar en una ciudad cada vez más envejecida.