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Sábado, 3 de marzo 2018
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Óscar Husillos iba a ser el nuevo campeón del mundo de 400 metros en pista cubierta, pero fue descalificado después de traspasar la línea de meta en primera posición. Los jueces, que se han dedicado todo el campeonato a sancionar la más mínima irregularidad, le quitaron el oro al palentino. El de Astudillo salió como un tiro, alcanzó en primera posición la calle libre y ya no hubo quien le tosiera. Su potente zancada, su estilo inconfundible en el correr, su extraordinaria técnica para tomar la curva le hicieron distanciarse enseguida de sus perseguidores. Pero pisó la línea en la primera curva, el astudillano fue descalificado y el recurso presentado por la delegación española fue rechazado por el jurado para echar por tierra meses de preparación por solo unos milímetros.
La de Husillos fue una decepción indescriptible, compensada en parte por el leonés Saúl Ordóñez que se hizo con la plata en 800, en una mala carrera del salmantino Álvaro de Arriba, después de que el estadounidense que acabó segundo fuera descalificado. Mientras, la gallega Ana Peleteiro también se llevó un metal en el triple salto.
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