La Cistérniga confirma su candidatura al ascenso

Más allá de juego o de ocasiones, se volvió a ver actitud, y siempre hay que tener esa pizca de suerte o de eficacia que cause la victoria. Los locales llegaban al choque tras dos jornadas sin conocerla, pero muy cerca de los puestos de cabeza y consiguieron dar un golpe sobre la mesa que les hacen soñar con cotas altas.

La Cistérniga empezó dominando, pero sin acercarse al área de Ángel. Solo Fernando se atrevió a probar al guardameta visitante con un disparo lejano, y aunque se marchó por alto, el vuelo del portero tuvo sus consecuencias, red rota y partido parado. Le vino bien ese parón al Villaralbo, que empezó a demostrar por qué va segundo en la clasificación, pero entre Tapias y el travesaño sacudieron la oleada zamorana.

Los locales sufrieron durante gran tramo de la primera mitad, pero el fútbol es siempre impredecible y esta vez no iba a ser menos. Una gran acción de Prieto desde la banda izquierda permitió a Pavel asestar un cabezazo que rebotó en un defensa y se adentró a cámara lenta en la portería visitante. Mayor efectividad imposible.

Pese al gol, el peligro azulón era más que evidente. Víctor tuvo en sus botas el empate, pero el larguero volvió a tener protagonismo y repelió el disparo. Así se llegó al descanso, con la sensación de que el uno a cero era demasiado botín para la fragilidad defensiva que estaba mostrando La Cistérniga.

Era difícil imaginar lo que sucedería en la reanudación. Chacón, central local, se encontró el balón botando en el medio campo. Se hizo un silencio en la grada que permitió oír el golpeo de empeine total de su bota derecha, y el lanzamiento fue simplemente perfecto. El guardameta local intentó pararla, pero nada. La imagen de todos los espectadores dejaba manos en la cabeza y signos de frotarse los ojos ante lo que había ocurrido.

El tanto, además de por su belleza, fue importante por su significado. Supuso un golpe muy duro al Villaralbo que no podía creerse lo acontecido. Tan KO dejó a los visitantes que ese gol derivó en numerosas ocasiones pudieron sentenciar el partido para el conjunto de Roberto García. El peligro de los forasteros era imberbe y, además, la fortuna había escogido bando.

Después, apareció Rodri con un disparo lejano después de una gran jugada individual que sí supondría la tranquilidad en el marcador. El encuentro estaba más que decidido, hubo tiempo para que Matías recortara diferencias a balón parado tras una serie de rebotes en el área de Tapias. Sin embargo, la reacción llegó muy tarde y la herida se hizo más grande cuando Rodri volvió a perforar la red, sin romperla eso sí, para colocar el resultado definitivo. La Cistérniga se asienta en la zona alta de la clasificación y buscará ante el Fabero seguir soñando con pelear el play-off de ascenso.

Golpe de realidad para el Villa de Simancas, que acabó goleado en su visita a El Bierzo. No fue tan inferior como refleja el resultado, pero tardó en reaccionar a las primeras acometidas de la Ponferradina B. Nada más empezar Alberto puso el primero y Óscar, desde fuera del área, puso tierra de por medio.

Dani Blanco casi recorta distancias, pero finalmente Unai, a centro de Suárez, descontó. Pablo de la Fuente aumentó las esperanzas de remontada cuando detuvo una pena máxima, pero diez minutos más tarde Mauro marcó el tercero, cuando mejor estaba el conjunto vallisoletano. Él mismo redondeó el resultado con el cuarto en otro fallo en la defensa visitante.

El mejor local de la liga volvió a su cita con el triunfo. El Mojados juega en casa y se maneja como pez en el agua. Goleó a uno de los equipos más fiables de la categoría. Inició su camino a la victoria con un gol de Samu aprovechando un buen centro y después Jesús, con un doblete, aprovechó su oportunidad en el once titular.

Sus dos tantos llegaron de mano a mano. Uno de ellos tras una buena prolongación de Chatún y la sentencia en una acción de gran combinación por parte del conjunto de Adri Fraile.

Regaló dos puntos el Laguna en su visita al campo del Atlético Candeleda. Los pupilos de Carlos Álvarez mostraron dos caras ante el colista de la categoría. Una gran primera mitad permitió al conjunto vallisoletano irse al descanso con 0-2 en el marcador. Pero los goles de Colino y Rabadán no fueron suficientes.

Los locales lograron empatar con dos goles en los últimos minutos del partido que dejan un muy mal sabor de boca a los laguneros. Primero Jesús y después Carlos, ambos en el descuento, quitaron dos puntos que habrían servido para que los visitantes siguieran en la parte alta de la tabla.