«Tengo la meta de vestir de nuevo la camiseta de la selección»
El palentino, que la pasada jornada cumplió doscientos partidos con el 'Submarino Amarillo', se encuentra en su mejor momento de forma
Doscientos partidos. Doscientos. Esta es la última cifra que acompaña al palentino Sergio Asenjo en sus logros deportivos. Ha defendido en doscientas ocasiones la portería ... del Villarreal, club al que llegó en 2013, cedido del Atlético de Madrid, después de un par de temporadas sin mucha regularidad ni protagonismo. A sus 30 años se encuentra en el mejor momento de su carrera, después de haber superado –y haber vuelto más fuerte– cuatro lesiones graves de rodilla. Arrancó la temporada sin defender la portería amarilla, pero a la cuarta jornada el técnico Javier Calleja le devolvió la titularidad. Actualmente, su equipo pelea por un puesto para disputar la Copa de Europa –son sextos, a dos puntos de la cuarta plaza–.
–Ha cumplido doscientos partidos defendiendo la portería del Villarreal...
–Para mí es el trabajo y el esfuerzo de muchos años, de pelearlo mucho y de superar muchas dificultades. Siempre intento mostrar mi mejor versión para que el Villarreal siga confiando en mí, que no es nada fácil en un equipo como este.
–Leí su mensaje de agradecimiento al club en las redes sociales...
–Me salió de dentro porque han sido años muy bonitos en Villarreal. No puedo olvidar tampoco los malos momentos de los futbolistas en forma de lesión. Y en esos momentos, el Villarreal siempre confió en mí y apostó por mí, que me iba a recuperar de la mejor manera. Y por este motivo escribí el mensaje y he llegado a esa cifra.
–Es su séptima temporada en el Villarreal. ¿Esperaba poder defender tanto tiempo la portería cuando fue cedido por el Atlético de Madrid?
–Cuando recibí la oferta del Villarreal, tenía compañeros como Godín, que había estado aquí. Él me dijo que iba a disfruta mucho en Villarreal, pero tampoco me suponía que iba a hacer historia aquí, la verdad. No, no lo pensaba. Pero todo jugador que viene a este club se enamora de la entidad, del entorno y de la zona. Mi familia y yo estamos encantados aquí y esto es muy importante tanto personal como profesionalmente.
«Fue una pena el resultado, pero lo importante es lo que todo el pueblo disfrutó»
Becerril-real sociedad
–Usted es un ejemplo dentro del mundo del deporte, ha salido en cuatro ocasiones de una lesión de rodilla grave...
–No es sencillo que un jugador de fútbol tenga que pasar por cuatro lesiones de rodilla. Pero, en mi caso, yo lo afronté de la mejor manera posible, con el entusiasmo que tenía por volver, por demostrarme a mí mismo que podía ser el mejor Asenjo posible. Y me apoyé siempre en mi mujer, en mis padres, en mi hermana y en la gente que realmente me quiere y que valoraba que estuviese trabajando tanto para ser mi mejor versión.
–¿Está hecho de otra pasta el deportista?
–Sí, creo que aparte de las lesiones que son momentos duros y complicados que hay que salir adelante, creo que la vida no es sencilla. Es cierto que tenemos privilegios y, sobre todo, hacemos lo que de verdad nos gusta. Pero también hay muchas cosas en la vida que tenemos que dejar de lado. Hay que sacar todo lo positivo de esta vida que nos toca vivir, pero también tenemos que estar lejos de la familia desde bien pequeños, perder momentos únicos con ellos y ojalá pueda recuperarlos.
–¿Qué les diría a los niños que sueñan con ser futbolistas profesionales?
–Les diría que yo cuando era pequeño ni me imaginaba que iba a ser futbolista. Que mi idea era pasarlo bien con los amigos, disfrutar y escuchar a los entrenadores para ser mejor. Porque si entrenas y mejoras, disfrutas mucho más, pero siempre desde el respeto al compañero. En el fondo, es una etapa de aprendizaje, que es lo más importante en el mundo de los jóvenes.
«Queremos volver a Europa. Ojalá nos clasifiquemos para disputar la Champions»
objetivo del villarreal
–Esta misma semana se ha presentado en Palencia un programa de formación para evitar la violencia en el deporte. ¿Se está normalizando la violencia, cualquier tipo, en el deporte?
–Hombre, no sé si normalizando, pero sí está siendo más habitual de lo que debería ser. Creo que depende del respeto y la educación que puedan dar los padres a los más pequeños. En ese caso, yo siempre he tenido una educación ejemplar por parte de mis padres. Siempre he trabajado con humildad y respeto hacia mi entrenador y mis compañeros, y antes era un hobby, ahora se ha convertido en mi vida y mi trabajo. Pero desde bien pequeño sigo contando con la amistad de todos mis amigos y eso es lo importante.
–El vídeo de un niño de once años defendiendo a una árbitra a la que están haciendo llorar desde la grada por sus insultos, ¿tendría que hacernos recapacitar?
–Sí, es un claro ejemplo de lo que se vive en muchos campos de fútbol de categorías infantiles y no tendría que volver a suceder. Los padres tienen que dar ejemplo a los más pequeños y tienen que ir a los campos a ver disfrutar a sus hijos. Creo que, en esas edades, el resultado es lo de menos. Lo importante es que hagan deporte, que tengan amigos y que crezcan como personas.
–Hace menos de dos semanas estuvo jugando como visitante en Zorrilla. ¿Es especial volver a jugar ante el equipo con el que debutó en Primera?
–Sí, por supuesto. Siempre que me bajo del bus y entro en el José Zorrilla es una sensación inmejorable. Es mi casa, es donde crecí. Estuve desde los doce años hasta los veinte y fueron los que me dieron la oportunidad de que Sergio Asenjo fuera conocido en el mundo del fútbol y estoy eternamente agradecido. Siempre que voy allí, me corre algo por dentro que es inexplicable y mucha gente me dice que quiere verme allí. Y eso, el futuro dirá.
«Los padres tienen que dar ejemplo e ir a los camposa animar y a ver disfrutar a sus hijos»
violencia en el deporte
–¿Siguió el partido de Copa del Rey del Becerril?
–Lo vi con mi mujer, explicándole que era un pueblo de Palencia. Mi padre estuvo en la grada viéndolo porque era una oportunidad única para el fútbol palentino. Fue una pena el resultado, pero lo importante es que todo el pueblo disfrutó.
–Quedó claro en ese partido que Palencia tiene ganas de fútbol de categoría...
–Sí, entre todos hay que apoyar al fútbol palentino y qué mejor que todos los aficionados apoyen a los equipos y les hagan crecer. Es un momento complicado, ya que el fútbol más amateur ha sufrido un bajón, pero creo que entre todos se puede revertir esta situación.
–¿Qué le parece el nuevo formato de Copa del Rey?
–Para mí es una maravilla. Ha fomentado la competición, todos los partidos son atractivos y cualquier equipo puede conseguir la clasificación. Nosotros no pudimos superar al Mirandés, y eso es lo bonito que ha hecho este formato, que los partidos son apasionantes y el Mirandés está en la semifinal de la Copa del Rey.
–¿Duele más la derrota ante un equipo de categoría inferior?
–Duele por la situación en la que estábamos. Creo que podíamos conseguir esa ansiada final a la que nunca ha llegado el Villarrreal y cada año peleamos, pero el Mirandés jugó muy bien y fue justo vencedor.
«El recuerdo de mi debut en Primera me acompañará siempre»
El guardameta palentino bajó a jugar al campo del San Juanillo, cuando le preguntaron, al estar asomado en la ventana de casa de sus padres, si se quería unir al partido. Ahí se puso por primera vez los guantes para defender la portería del San Juanillo, el club de fútbol de su barrio en Palencia, en el que militó hasta que fue cadete de primer año, que fue fichado por el Real Valladolid.
Después de jugar con el Valladolid Promesas –y medirse al Palencia– su debut en Primera División fue, casualidades de la vida, ante el Villarreal, que perdió 2-0 en el Zorrilla, con Sergio Asenjo defendiendo el fuerte pucelano. Eso fue el 12 de diciembre de 2007, fecha que recordará toda la vida el cancerbero palentino. Y no solo eso. Aún conserva la camiseta con la que debutó en el estadio pucelano hace ya más de doce años. La tiene colgada en su habitación, en casa de sus padres. «La ovación que me brindó el Zorrilla al término del partido fue impresionante y tengo un recuerdo que estará conmigo de por vida», reconoce el portero.
Siempre que tiene unos días de descanso, aprovecha para volver a Palencia. «Me gusta estar con mi familia, ir con los amigos a tomar algo, ir a mi pueblo a ver a mis tíos y a mis primos, ir al bar a ver las personas con las que he crecido. He tenido que dejar muchas historias atrás por vivir el fútbol, que es muy bonito, pero dejas lo demás de lado. Por eso, en cuanto puedo, voy a los sitios que tuve que dejar con doce o trece años», reconoce.
–Dicen que la paternidad cambia la forma de ver la vida. ¿Y la forma de ver el deporte?
–Sí, todo es mucho más estable. Tienes más cosas en la cabeza que antes y ahora acabo los partidos y estoy deseando venir a casa para ver a la pequeña. Antes me comía más la cabeza por cosas que habían pasado en el partido y ahora tengo también otras de las que preocuparme. Ahora es llegar a casa y te evades de lo que ha sido ese día, que es el día de partido, con mucha tensión.
–¿Qué momento recuerda con más cariño como futbolista?
–Mi debut en Primera. Porque no es fácil que un entrenador apueste por un jugador de 18 años para debutar en Primera y se lo agradeceré eternamente a José Luis Mendilibar. Eso y el debutar con la selección española, después de unos años complicados y de lesiones. Es algo que recordaré toda la vida.
–¿Trabaja por volver a defender la camiseta de la selección?
–Hay que tener metas y luchar por ellas. En los malos momentos era trabajar mucho y volver a ser el de siempre, mientras que ahora, en los buenos, tengo mucha estabilidad por el club y vamos a pelearlo. Voy a intentar hacer un buen año y poder volver a vestir esa camiseta que es lo más grande.
–A dos puntos de los puestos de Copa de Europa, ¿está en su mejor momento el Villarreal?
–Noviembre fue muy complicado, pero ahora llevamos una racha inmejorable. El equipo está convencido de hacerlo bien y de volver a Europa. Ojalá podamos clasificarnos para la Champions.
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