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El Norte
Valladolid
Domingo, 29 de diciembre 2024, 17:07
Valladolid amaneció con la niebla en el horizonte y la Cúpula del Milenio atiborrada de deportistas. La ciudad recuperó su tradicional carrera de fin de año con una Pucela Sansil que registró cifras de récord en su estreno. Alrededor de 4.000 atletas se calzaron las zapatillas y desafiaron al mercurio para despedir el año saboreando la experiencia de recorrer 5,3 kilómetros por el centro de la capital castellana. Iker Velasco y Alicia Recio inscribieron su nombre en la primera edición de una cita, que se asoma al calendario con la intención de convertirse en un referente a nivel regional y nacional.
La niebla se abrió al tiempo que los corredores se ajustaban el disfraz para atravesar el arco de salida y meta. Las nubes se disiparon en hora para facilitar una experiencia gélida pero enriquecedora. La Fundación Municipal de Deportes puso ayer fin a una sequía que duraba desde 2017. En 2020 se celebró de forma virtual, pero nada que ver con el ambiente que se vivió ayer en las calles de la ciudad. Con el puente aledaño a la Cúpula del Milenio abarrotado de gente, los 4.000 valientes tardaron cinco minutos en cruzar el arco de salida como consecuencia del enorme volumen de participación. La avenida Miguel Ángel Blanco escenificó la fiesta del atletismo vallisoletano. Antes del inicio, el alcalde de la ciudad, Jesús Julio Carnero, presidió el corte de cinta y otorgó a Borja Lara, gerente de la FMD que se jubila en enero, el título de Silvestre del año como premio a su trayectoria al frente del deporte vallisoletano. La Pucela Sansil instituyó ayer un reconocimiento que perdurará en las siguientes ediciones para reconocer la labor de las personas que destaquen por su compromiso con los valores del deporte durante el año en curso.
El vocalista del grupo vallisoletano Siloé, Fito Robles, fue el padrino de la carrera. Al son de los acordes de su ya hiperfamosa 'todos los besos', el cantante desgranó, de viva voz, la cuenta atrás y dio la salida con un «viva Pucela, la mejor ciudad del mundo», que descorchó la primera edición de la multitudinaria Pucela Sansil, en la que participaron diferentes concejales del Ayuntamiento de Valladolid como Blanca Jiménez, Rodrigo Nieto, Carolina del Bosque y Alejandro García Pellitero, además del diputado nacional Ángel Ibáñez.
Iker Velasco impuso su ley en la competición masculina. Empleó un tiempo de 15:24 para recorrer los 5,3 kilómetros que permitieron a los atletas disfrutar de la magia que destila el centro de la ciudad en plena Navidad. Sus compañeros de escapada, Raúl Gómez y Juan José Buena se descolgaron en la zona de Caballería, aunque nunca perdieron la esperanza de alcanzar al líder. La calle Miguel Íscar presenció una batalla a tres que finalmente se decantó a favor del atleta del Club Triatlón Bétera (Valencia), vallisoletano de cuna. «El ambiente ha sido excelente. El público ha estado sensacional. Repetiré el año que viene», confesó antes de explicar la clave de su triunfo: «A partir del tercer kilómetro cambié de ritmo y ya fui por delante hasta el final».
La Pucela Sansil femenina también resultó trepidante. La jovencísima Alicia Recio gobernó la carrera prácticamente desde el inicio y no dio tregua a Elena Díez y Esther Gómez, quienes ocuparon los siguientes peldaños del podio. Alicia es entrenadora del Club Atletismo Mayte Martínez Racing Valladolid y no podía abrochar su sonrisa tras cruzar la línea de meta. «He ido de menos a más y estoy muy contenta. El público me ha ayudado mucho. Es una maravilla», indicó.
Además de la carrera en sí, la Pucela Sansil apeló a su lado más solidario con la recogida de juguetes para niños enfermos de cáncer gracias a la Asociación Campanilla. En los próximos días, la organización dará a conocer los nombres de los ganadores del premio al mejor disfraz y al contenido más original en las redes sociales. La carrera se convirtió en un improvisado desfile de disfraces. Desde el tradicional de Spiderman a un grupo que corrió vestido de árbol de Navidad, Rafiki (Rey León), Papá Noel y tres deportistas que se embutieron en unas botellas de cerveza como preámbulo de la fiesta de Nochevieja, entre otros muchos disfraces. Una veintena de atletas llegaron a la meta con una camiseta en honor a Ana. «Corremos por ti, Ana», gritaron al unísono en lo que fue uno de los momentos más emotivos de la mañana.
Los niños tampoco se quisieron perder la Pucela Sansil y pusieron el mejor broche a una jornada plena de deporte, familia, amigos y Navidad. Más de 300 pequeños, muchos de ellos disfrazados, compitieron de una forma lúdica para despedir el año corriendo. Sin aliciente clasificatorio, todos recibieron como premio la medalla conmemorativa de la carrera popular de fin de año de Valladolid, organizada por la FMD con la colaboración y producción de Madison, y la gestión deportiva de Runva Sport.
Con el éxito bajo el brazo, el ayuntamiento ya piensa en seguir batiendo récords en 2025. El hecho de haber sumado 4.000 inscritos en su primera edición, anima a la Fundación Municipal de Deportes a seguir apostando por un producto de ciudad, que nace para unir y que aspira a convertirse en una de las carreras de fin de año más especiales de Castilla y León.
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