
Ver 32 fotos
Real Valladolid Baloncesto
Al UEMC Real Valladolid le queda mucha vidaSecciones
Servicios
Destacamos
Ver 32 fotos
Real Valladolid Baloncesto
Al UEMC Real Valladolid le queda mucha vidaJ. C. Cristóbal
Sábado, 8 de marzo 2025, 22:13
Al UEMC se le agotaba el aire, tenía el agua a la altura de la nariz y le venía una ola llamada Palencia para terminar ... de ahogarle; después de cinco derrotas consecutivas, de meterse de lleno en la zona de descenso, de enfrentarse a uno de los gallitos de la categoría, el equipo tuvo energía y ánimo para lanzar una última brazada, poner patas arriba el Pisuerga y conseguir una victoria que vale mucho más que los puntos añadidos en la tabla, y es que la plantilla de Iñaki Martín debe tomar este día como punto de referencia para afrontar la recta final del campeonato. Todavía no ha llegado a la orilla, tendrá que nadar bastante más, pero de momento ya tiene por detrás a Castellón, Alicante y el desahuciado Morón.
Fue un partido vibrante, con el Pisuerga al borde del lleno, presencia de muchos aficionados palentinos y respuesta de la parroquia pucelana, que se convirtió en el sexto jugador cuando el marcador estaba a punto de romperse a favor del equipo visitante. Con 72-77 era de esperar que el mayor potencial de Palencia gestionase mejor esa ventaja para asegurar la victoria y, sin embargo, fue el Valladolid, quizá porque no tenía nada más que perder, quien se lanzó a la aventura de una manera casi suicida.
UEMC
Torres (16), Samkelo Cele (7), Kovacevic (14), Wilson (13), Vucetic (4) -quinteto inicial-; García-Abril (0), Puidet (5), Manchón (8), Demers (10), Sans (3), De la Fuente (0) y Mballa (12).
92
-
83
Palencia
Borg (15), Oroz (0), Pablo Hernández (14), Vaulet (18), Krutwig (11) -quinteto inicial-; Wintering (5), Kunkel (18), Manu Rodríguez (0) y Chema González (2)
Árbitros: Lema Parga, Garvin Domingo y Sierra Carrillo. Exclusión de Luis Guil, entrenador del Palencia (min. 40).
Parciales: 26-22, 22-29 (48-51) -descanso- 20-19 (68-70), 24-13 (92-83)
Incidencias: Polideportivo Pisuerga. Jornada 26ª de Primera FEB.
Primero fue Mballa, muy motivado ante su ex equipo, el que obligó a Luis Guil a solicitar un tiempo muerto porque su ventaja de cinco puntos se esfumó hasta una desventaja de tres (80-77). No sirvió de nada porque para entonces el Valladolid ya estaba lanzado, Palencia no encontraba a sus mejores jugadores, y Dani Manchón, ante sus paisanos, Mike Torres y Shemar Wilson encendieron un minuto de gloria para añadir al parcial anterior de 8-0, uno ya definitivo de 12-0 (del 80-81 al 92-81). El cabreo de Luis Guil fue tal que cogió el camino a los vestuarios antes de tiempo por cargar en los árbitros la frustración de la derrota.
El derbi castellano fue de los que conectan en la grada porque, desde el salto inicial, los ataques estaban por encima de las defensas. Torres empezó a toda vela con cinco puntos consecutivos y Pablo Hernández le respondió con seis. Desde ese 5-6 el Palencia fue casi siempre por delante, también siempre con Valladolid a la vista, no se descolgó en ningún momento, aunque alguna pérdida por precipitación hizo temer una escapada a partir de la muñeca de Borg. No fue suficiente porque Mballa lanzó un fogonazo y Kovacevic cerró con un triple un primer parcial de locura (26-22).
No bajó el pistón el Valladolid después del primer parón. Estaba en racha, Demers y Puidet se sumaron a la fiesta para colocar el 32-25 y encender un aviso de alarma en Palencia; el que mejor lo entendió fue Kunkel, que disfrutó hasta el descanso como si peloteara en el jardín de su barrio e inclinó la balanza de su lado, de ese 32-25 se pasó a un 37-42 que tampoco bajó los brazos blanquivioleta.
La salida de los camerinos coincidió con el peor momento del Valladolid. Atacó mal hasta agotar el tiempo, el magisterio de Krutwig, un pivot que firmó seis asistencias, y la entrada en juego de Violet dieron márgenes a Palencia que le dejaban al borde del estirón; hasta que en el último cuarto apareció la defensa de Valladolid, que tomó su zona como una trinchera inaccesible para Palencia, que se secó en ataque con solo trece puntos en ese parcial y Valladolid salió en estampida al toque de clarines de Torres, Mballa, Manchón y Wilson. El Pisuerga se vino abajo.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Santander, ¿una ciudad de quince minutos?
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.