Imagen publicada por la compañía en sus redes sociales, con la torre de La Antigua llena de excrementos de palomas. Lezards Bleus

Valladolid

El informe jurídico sobre la actuación en La Antigua certifica que «no hacía falta autorización» de Patrimonio

Los artistas advierten de que lo que se encontraron al acceder a la torre fue «una iglesia en un estado de negligencia avanzada»

Antonio G. Encinas

Valladolid

Martes, 27 de mayo 2025, 06:45

El Ayuntamiento solicitó «una valoración urgente» a sus técnicos para saber si era preciso contar con una autorización administrativa de Patrimonio para que se pudiera celebrar la actuación del grupo Lezards Bleus en la torre de La Antigua ... . Y esa valoración apuntó dos cosas. La primera, que no era necesario ese permiso. Y la segunda, que la intervención no resultaba dañina para este bien de interés cultural.

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«Según se comunica verbalmente», explica el informe jurídico, «el espectáculo va a utilizar de forma puntual la estructura de la torre de la iglesia al haber tendido un cable sobre el que se descolgará un actor». Un cable que, según se comprobó, no se ancló a la torre ni hizo precisa «ninguna perforación», dice el documento. Y añadía: «Se cuenta con la autorización del arzobispado».

Tal es así que el propió párroco de La Antigua acompañó a los actores durante su primera visita a la torre, según fuentes municipales, e incluso les pidió que recolocaran algunas de las tejas. La propia compañía francesa, este domingo, hacía público un comunicado para defender su actuación y el modo en que cuidaron del patrimonio. Contaron que la representación fue primero cancelada y luego autorizada «solo 15 minutos antes de su inicio» el día 21, cuando se realizó el primer pase. Ese momento de suspensión 'cautelar' vino motivado por un tuit de Patrimonio Valladolid que alertaba de lo que se iba a representar en La Antigua. Fue entonces cuando Irene Carvajal (Vox), concejal responsable, solicitó el informe jurídico por escrito.

«Dicha intervención ha sido validada técnicamente por personal de la Fundación Municipal de Cultural», decía el informe, que matizaba que esta misma compañía, que es asidua del TAC desde 2012, «ha realizado este espectáculo en otros muchos lugares, en iglesias y en otros inmuebles con un alto valor histórico».

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El informe, que por escasez de tiempo admite que «no se ha profundizado» en el régimen específico de protección de La Antigua, explica que la normativa obliga a que su utilización esté «siempre subordinada» a que no se pongan en peligro «sus valores». «No se aprecia que por su entidad [esta actividad] pueda suponer un evidente riesgo de destrucción o deterioro», concluye. Y sentencia que no es necesaria la autorización de Patrimonio porque a su entender no se produce «la alteración de bienes muebles» que se contempla en la normativa.

La compañía, mientras tanto, insistía en que pusieron el máximo empeño en no dañar nada. Y, eso sí, su comentario sobre el estado la iglesia de La Antigua dejan en muy mal lugar a las autoridades responsables de conservar el patrimonio vallisoletano. «Nuestras zapatillas son de goma blanca, para no dejar huellas. No hay piezas metálicas en contacto con la piedra, no hay cables, no hay puntos de anclaje invasivos», explicaron. Y a continuación: «Lo que descubrimos en el lugar fue una iglesia en un estado de negligencia avanzada: tejas rotas, una gruesa capa de excrementos y cadáveres de palomas, renovaciones obsoletas amenazando con caer, cadenas de campanas oxidadas, gárgolas obstruidas, un grafiti, proyectores sucios. Antes de que la morada de Quasimodo pudiera acoger el espectáculo, limpiamos, barrimos, desescombramos, borramos, reparamos, protegimos».

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Y concluyen su alegato con dos «preguntas sencillas». «¿Por qué no se desplazaron al lugar para verificar nuestras instalaciones de cuerdas? ¿Cómo se nos puede acusar de negligencia, donde nosotros, al contrario, cuidamos el monumento?».

Un espectáculo en dos sesiones con un coste de 15.897,97 euros

La Plataforma de Contratación del Sector Público (PCSP), portal web cuya principal función es facilitar la información sobre la actividad contractual del sector público recoge los detalles del contrato entre la Fundación Municipal de Cultura y la compañía francesa Lezards Bleus para las dos representaciones, días 21 y 22 de mayo, de su espectáculo 'Quasimodo y Esmeralda' en el marco del 26 TAC por un importe total de 15.897,97 euros sin impuestos, una cuantía que la compañía percibirá en su totalidad al tratarse de una cancelación, la del jueves, por causas ajenas a los artistas, que además, en su nota hecha pública el pasado domingo, señalaban que «esta decisión tendrá un impacto en la compañía: programadores potenciales no pudieron descubrir el espectáculo y los miembros del jurado del festival no podrán valorar la calidad de la obra».

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