«El amor es más místico;el querer es casi una palabra virgen»
Presenta en Valladolid el libro con el que ha ganado el Premio Nadal: «Esta es la novela de mi vida»
Su primer recuerdo lector está en una cama confortable y una cálida voz, la de su madre, que le leía cuentos antes de dormir. «Ahí ... empezó la magia», dice la escritora y periodista de 'ABC' Inés Martín Rodrigo (Madrid, 1983), que este jueves presentó en la librería Oletvm de Valladolid 'Las formas del querer', último Premio Nadal (publicado por la editorial Destino). Aquellas palabras formaban mundos en su imaginación y comenzaron a forjar un sueño –el de escribir– que años después se hizo realidad. Ycon un texto que, dice, sin ser grandilocuente ni rimbombante, es la novela de su vida.
«Tiene mucho de mí. No es una autobiografía, pero sí que bebe mucho de las cosas que he visto, que me han pasado, de vivencias que he atravesado. Esta historia la empecé a escribir, sin hacerlo, cuando murió mi madre. Yo tenía 14 años (hace 25 años de esto)y empezó el viaje que ha supuesto esta novela. Con el punto final de 'Las formas del querer' acaba este viaje. Por eso esta novela es también un viaje. Un viaje en el tiempo, porque recorremos 80 años de la historia de una familia y, al mismo tiempo, 80 años de la vida de nuestro país».
–¿Más querer o más amar?
–¡Querer! El amor es más místico. Eso se lo dejo a Santa Teresa. Querer es mucho más amplio. Ymucho más terrenal. Yo quiero mucho a las palabras y soy muy consciente de las que uso y de cómo las uso.Y la palabra amor está tan manoseada que al final se ha terminado por desvirtuar. A veces hasta se ha vaciado de contenido.Y con el querer no ha pasado. El querer es prácticamente una palabra virgen. Eso nos permite muchos usos y ningún abuso.
–Y en el libro habla de muchos quereres:a los abuelos, la familia, los libros, la cultura...
–El querer menos importante de la novela es ese querer convencional:el de para toda la vida. El resto de quereresestá mucho más presente. La amistad, por ejemplo, que es una de las formas más bonitas que tiene el querer. Oel querer fraternal, entre hermanos, que en esta novela es fundamental. También esos quereres prohibidos y perseguidos en un momento dado de nuestra historia muy reciente. Todos esos quereres van bailando y permitiendo que la trama de la novela se vaya sosteniendo.
–Y el quererse a uno mismo.
–Ese es el más difícil de todos. La protagonista, Noray, se pasa toda la vida (y por tanto, toda la novela) intentando aprender a quererse a ella misma. No sé si lo consigue. Por momentos pienso que sí. En otros que no. Quererse a un mismo y quererse bien es muy difícil, sobre todo cuando llevas a la espalda una mochila cargada de tantas piedras como lleva Noray. Su vida está marcada por un trauma, el de la ausencia. Yla ausencia no tiene por qué estar vinculada a la muerte. Eso la termina marcando y esa herida sin cerrar hace que no sepa cómo quererse a sí misma. Yes algo que se ve desde el propio nombre.
–Noray.
–Son esos postes de hierro a los que se amarran las embarcaciones para que no salgan a la deriva. YNoray se pasa toda su vida a la deriva, porque no sabe cómo quererse.
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