El Foro de la Cultura reúne a pioneras que enfrentaron el miedo para triunfar en sus profesiones

García Alonso, astronauta y directora de un equipo en el Centro de Investigaciones Oncológicas de Madrid dedicado a encontrar tratamientos contra el cáncer de pulmón y de páncreas, abundó en el miedo a la oscuridad y al exponerse a la gente como uno de los primeros terrores de su infancia; Socas, cantante y rapera, al «inculcado por los adultos cuando dicen que no se va a ser capaz de conseguir algo», e Iglesias, paralímpica, a las serpientes y a las competiciones.

«Con ambas aprendí que el miedo es algo que te ayuda a enfrentar las cosas que viene», reveló esta última. «Pero el deporte, a pesar de las exigencias de los altos rendimientos, es un mundo muy bonito, siempre que se haga con cabeza». También reclamó la necesidad de generalizar apoyos, incluido el psicológico, más allá de quien tenga o no medallas. «Es una visión que tiene que cambiar mucho», sentenció.

«El miedo tiene dos caras, puede ser algo paralizante si no tienes herramientas para enfrentarte a ello, pero por otra parte es algo motivador, que demuestra qué cosas son las que verdaderamente te importan», aportó García Alonso: «Cuando ves que aquello que te aterraba no solo te ha permitido ir más allá sino que contribuye a relativizar mucho el resto de los miedos, ayuda mucho».

La científica, con todo, confirmó que hoy por hoy sigue viendo aterrador el negacionismo: «Justificar la anticiencia con la coartada de que tienes derecho a creer en lo que te venga en gana, y esto tiene repercusiones directas en la salud de la sociedad, tiene un efecto y un daño preocupante». Sobre el cáncer, sin embargo, aseveró que no había que tenerle tanto respeto: «No es cuestión de que nos aterre sino que hay que entender cómo afecta a cada persona».

En un cambio de tercio, Socas abordó cómo la ansiedad y la depresión repercuten en quienes resuelven dedicarse a la música: «Es fundamental rodearse de personas que tengan calidad humana», aseveró. Tanto en su equipo como en el público: «Los espectadores del freestyle, como los del fútbol, son los más complicados», agregó Socas, aseverando que no iba a dejar que el miedo a complacerles la cambiase en sus ideas feministas.

A las 19 horas, el Foro continuó con una nueva mesa en torno a la filosofía y a la escritura de los miedos, con 'El temor a la vida', conversación entre Ana Carrasco Conde y Martín Caparrós moderada por Mara Torres.