Mañueco alerta de que los afiliados están «descorazonados» y exige atajar el cisma del PP
El presidente del PP de Burgos es partidario de convocar un congreso extraordinario para relevar a una dirección nacional, cuyo «crédito está muy tocado»
Alfonso Fernández Mañueco considera que la crisis que sufre el Partido Popular, con epicentro en Madrid, no puede prolongarse un minuto más. Asegura que ha trasladado a Pablo Casado «la voz de la gente PP de Castilla y León, de esos alcaldes, concejales, interventores, apoderados, simpatizantes, militantes, votantes que están absolutamente indignados y descorazonados; y quieren una solución rápida, inmediata, eficaz, que apueste por la unidad del partido», expresó el presidente de los populares de Castilla y León. «Hay un problema que tiene que atajarse de inmediato», remarcó Fernández Mañueco. «En estos momentos tenemos que cambiar las decisiones que se están adoptando», añadió.
Al margen de eso, Alfonso Fernández Mañueco evitó posicionarse sobre las 'soluciones' para superar el conflicto abierto entre Pablo Casado, presidente nacional del partido, e Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la comunidad de Madrid. Eludió dar su opinión sobre si es necesaria o no la salida del secretario general, Teodoro García Egea, sobre si hace falta o no un congreso extraordinario o sobre si ve al gallego Alberto Núñez Feijóo como alternativa a Casado. El dirigente de Castilla y León precisó que él hablaba de soluciones «en privado», no en público. Por «lealtad».
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«Quien tiene que atajar esta situación es ahora mismo quien es presidente del Partido Popular. Tuve la oportunidad de hablar con él el jueves. Me llamó y le trasladé la indignación por la situación provocada, la sensación de desazón que existe ahora mismo», precisó el dirigente de autonómico. «Estamos profundamente preocupados por la situación y, lógicamente, esto no puede seguir durante mucho tiempo», reconoció.
Quien sí ha sido claro es el presidente del PP en Burgos, Borja Suárez, que consideró que la solución a la crisis que vive el partido pasa por un cambio a través de un congreso con la elección de un nuevo equipo y un cambio de rumbo en la formación popular.
En declaraciones a Onda Cero Burgos recogidas por Ical, Suárez manifestó que si hay que esperar al congreso ordinario del partido, previsto para el mes de julio, «se va a sufrir mucho». Reconoció que es necesario un cambio de la actual dirección, cuyo «crédito está muy tocado».
Por su parte, el presidente del PP de Soria, Benito Serrano, pidió en declaraciones a Ical «calma y tranquilidad» ante la situación interna que vive su partido e insistió en que la fractura abierta en la formación se tiene que «solucionar desde Madrid». Además, consideró que la «clave» debe ser la unidad y que la salida podría pasar por la celebración de un congreso.
Alfonso Fernández Mañueco optó por no pronunciarse ante ese posible congreso extraordinario para rehacer la dirección nacional popular. Manifestó que no iba «a profundizar» más allá de trasladar la sensación de «desazón» de cargos y afiliados que puede recabar cualquiera que «salga a la calle y pregunte». Y ante la posibilidad de que la salida a la crisis sea que Alberto Núñez Feijóo tome las riendas del partido, Fernández Mañueco evitó pronunciarse: «Sobre las soluciones, no es este foro en el que yo tengo que hablar», esquivó.
