Las empresas auxiliares de automoción piden socorro al Gobierno
Los 80 socios del clúster de Castilla y León advierten de que necesitan medidas «inmediatas y eficaces» que corrijan una subida de los precios de la energía que «está destrozando las cuentas del sector
Las ochenta empresas e instituciones que componen el clúster de automoción de Castilla y León (Facyl) suscriben un escrito que han dirigido a la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, y a la ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, para exigir al Gobierno que tome medidas «inmediatas y eficaces» para corregir la subida del coste energético. La carta está firmada por agrupaciones similares de Navarra, La Rioja, la Comunidad Valenciana, Aragón, Galicia, Cataluña y Cantabria.
Advierten de que «el incremento exponencial del precio de la energía está destrozando las cuentas de las empresas por el incremento de los costes fijos y variables y, por lo tanto, de la economía española». Explican que existen «demasiadas compañías que ya han visto reducido o anulado su margen de beneficio», de modo que el rendimiento que obtienen por su actividad es nulo. «Algunas de ellas han tenido que cambiar los turnos a fin de semana para intentar reducir el gasto en energía», ponen como ejemplo.
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Detallan que el precio medio de la energía en 2020 fue de 36,96 euros por megavatio-hora (MWh) y en 2021 subió hasta los 111,93 euros/MWh de media, mientras que en los últimos días, ha llegado a alcanzar los 700 euros/MWh en alguna hora del día.
El sector de la automoción es «intensivo el consumo energético», recuerdan, por lo que «el coste de la energía es un factor crítico que marca de manera decisiva la posición competitiva». El clúster de Castilla y León, Facyl, agrupa a empresas, centros tecnológicos e instituciones que dan empleo a más de 28.000 personas y facturan en torno a 9.100 millones de euros anuales. La suma de los que suscriben el comunicado son 800 entidades del sector, de las que 500 son pymes, y que generan 73.000 millones de facturación y más de 266.000 puestos de trabajo. «La crisis actual conduce al cierre masivo de compañías y la consecuente pérdida de puestos de trabajo», alertan.
Un Gobierno fuera de la realidad
En su opinión, «la estructura de precios del sector energético debe ser actualizada, porque si bien en su momento podía tener una razón de ser, es evidente que ahora mismo el sistema es perjudicial para garantizar el futuro de las empresas españolas». Por ello piden al Gobierno que adopte «todas las acciones necesarias para ayudar a los hogares, pero sin olvidar a los grandes consumidores industriales».
Las empresas de la comunidad en particular lamentan la falta de decisión del Gobierno de Pedro Sánchez para tomar medidas urgentes que garanticen la viabilidad de las compañías y ven «insuficiente y alejado de la realidad el anuncio de rebajar los costes de la energía (electricidad, gas, combustibles) dentro de 15 días porque el sector no dispone de tiempo». «Cada día que pasa es tiempo perdido que, desgraciadamente, puede acarrear paradas de producción, cierres y, por tanto, consecuencias muy negativas de cara al mantenimiento del empleo en uno de los puntales de la economía de Castilla y León», manifiestan desde Facyl.
