Castilla y León ha perdido 75.580 pescadores en los últimos 16 años
Los cambios en la normativa o la población envejecida son algunas justificaciones de la reducción de licencias
Muchos pescadores de la región están dejando correr aguas abajo sus licencias. Los datos de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente muestran cómo en ... el año 2002 existían un total de 222.312 personas con licencia en vigor y en 2018, últimos datos disponibles, se ha pasado a 146.462, un total de 75.850 licencias menos.
Entre las explicaciones que se dan a esta merma siempre aparecen el envejecimiento de la población o la migración de los jóvenes a los grandes núcleos pero hay quien añade el cambio en la normativa de pesca de unos años a esta parte. «La gente mayor se muere, los jóvenes se van a trabajar fuera pero yo añado: se ha pasado de poder pescar todo con muerte a todo sin muerte y eso ha fomentado el furtivismo», mantiene Pedro Colmenero, presidente de la asociación de pescadores Cuenca del Río Águeda, en Ciudad Rodrigo.
En los últimos días se ha publicado la Orden Anual de Pesca para 2020 y todas las partes, tanto pescadores como la propia Junta, coinciden en que no hay novedades sustanciales con respecto a la Orden del año anterior. Las primeras zonas con autorización para pescar lo harán el próximo 21 de marzo.
En el caso concreto de esta cuenca del Águeda y de toda la provincia de Salamanca continuarán sin un solo AREC, que son las aguas de régimen especial controlado, que permiten ciertas concesiones en circunstancias especiales como es la pesca con muerte.
Datos positivos
«Desgraciadamente, de los 126 AREC que existen en Castilla y León en Salamanca no hay ninguno, y en la mayoría de ellos se puede pescar con muerte algo que beneficia a esas zonas porque por ejemplo, sus establecimientos turísticos pueden obtener una serie de pases, cosa que aquí no sucede y perjudica». Asegura que «muchos pescadores de la zona se sacan la licencia en Portugal que cuesta 50 euros para pescar truchas porque aquí, que cuesta 16 euros la licencia, no pueden».
El objetivo de esta asociación es poner de acuerdo a alrededor de 28 municipios para conseguir alguno de esos tramos AREC «para que la gente de esos pueblos pueda pescar como siempre».
Desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente aprecian que desde que se aprobara en 2013 la Ley de Pesca que introdujo la pesca sin muerte, «las poblaciones de interés preferente mantienen una evolución positiva», entre esas especies se encuentra la trucha.
Estas mismas fuentes confirman «una mejora muy sustancial en densidad y biomasa» en las provincias de León y Palencia mientras que las provincias del sur como Salamanca, Segovia o Valladolid «mantienen las poblaciones más reducidas debido a la ubicación geográfica». También en Zamora se ha registrado una mejora pero «alejados» de los resultados de otras zonas.
En la región se ubican 611 estaciones para controlar todos estos aspectos y los mejores datos aparecen en León donde en una de ellas se registra una densidad de 0,72 individuos por metro cuadrado cuando una densidad alta ya es de 0,2 individuos.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión