La apuesta fotovoltaica se suma a la eólica y consolida a Castilla y León como líder en renovables
Las energías verdes ya suponen el 81% de la potencia instalada tras la integración de 811 MW, el 57% con aerogeneradores y el 37% con placas solares
De ser una potencia energética gracias al carbón, a seguir siéndolo gracias a las renovables. El punto y final de las centrales térmicas no ha ... impedido que la comunidad se mantenga entre las mayores generadoras de electricidad de España. Castilla y León avanza con paso firme en el camino de la transición energética y consolida su liderazgo nacional en potencia renovable instalada, gracias a la integración en 2019 de 811 nuevos megavatios (MW) verdes, de los que el 57% fueron eólicos, el 37% fotovoltaicos y el 6% restante, de a otras tecnologías limpias, según el último balance de Red Eléctrica de España (REE).
La región acabó el año pasado con 11.343 MW renovables, que suponen el 80,8% del total de su parque generador y representan una quinta parte de la potencia instalada limpia de España. Sigue mandando la eólica, que en 2019 registró un crecimiento del 8,3% y se ha afianzado como la primera tecnología en capacidad de generación. Sus 6.051 MW convierten a Castilla y León en la comunidad con mayor potencia eólica. La cuarta parte de los aerogeneradores del país están en la región.
Con menor peso pero mayor empuje, la energía solar fotovoltaica conectó a la red 300 nuevos MW, con un aumento del 61% con respecto al año anterior.
El año pasado fue el mejor de la historia para la energía fotovoltaica en España, con un nuevo récord de capacidad instalada tanto en plantas en suelo, con 4.201 nuevos MW, como en autoconsumo, con 459 MW. Como resultado, según informa la UniónEspañola Fotovoltaica, por primera vez desde 2008, España se situó como mercado líder a nivel europeo y sexto a nivel mundial. Castilla y León, con 796 MW instalados, es la sexta comunidad más productora de electricidad fotovoltaica.
La apuesta por las energías renovables propició que, de los 22.365 GWh de electricidad generados en Castilla y León en 2019, el 85,2% fueran producidos a partir de estas tecnologías, lo que se traduce en un incremento anual de 8,3 puntos porcentuales. La eólica, con un 55,6 % de aportación, ha ocupado el primer lugar en el mix, seguida de la hidráulica (24,5%) y la cogeneración (12,6%).
Excendentaria
El año pasado fue también testigo del proceso de descarbonización de Castilla y León, con el cierre de la central de carbón de Anllares, en León, que restó 347 MW de potencia instalada de generación contaminante. De hecho, en 2019 la producción eléctrica con este combustible fósil se redujo el 89,8%. En concreto, esta tecnología solo tuvo una participación del 1,5% en el mix de generación, la cifra más baja desde 2010.
Desde el lado de la demanda, Castilla y León consumió el año pasado 14.210 GWh, el 0,5% menos que en el ejercicio previo. Como produjo 22.401 GWh, ello provocó una ratio generación/demanda del 157,6%, la segunda más elevada del mapa autonómico tras la de Extremadura (423%) y la de Castilla-La Mancha (188%).
El excedente, esos más de 8.000 GWh 'exportados' por la comunidad, fue una vez más a Madrid. De hecho, para facilitarlo, el año pasado continuaron los trabajos de construcción del eje Tordesillas-Galapagar-San Sebastián de los Reyes para el mallado entre Castilla y León y Madrid. Además, REE puso en servicio las ampliaciones de las subestaciones Tordesillas 220 kV y La Mudarra 400 kV para la conexión y evacuación de generación renovable.
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