Rábano: «La degeneración macular es primera causa de ceguera legal a partir de los 65 años»

El doctor Rábano, especialista en Oftalmología del Hospital Clínico Universitario de Valladolid y director médico de la Clínica QUO desde su apertura en el año 2006, repasó los detalles de la prevención en las patologías que afectan a los ojos en una nueva jornada de las Aulas de Salud de El Norte de Castilla. Un encuentro que se celebró una vez más el salón de actos de Caja España-Caja Duero con el patrocinio de DKV Seguros Médicos, Volkswagen Vehículos Comerciales, Ambuibérica, la fábrica de galletas Gullón y la Junta de Castilla y León.

Centró su intervención, apoyada por didácticas imágenes, en cuatro problemas de la vista, que tienen en común una alta prevalencia, que de no tratarse llevan a la ceguera y que estám asociadas a la edad. Explicó que las cataratas, que causan una disminución de agudeza visual provocada por la opacificación del cristalino, tienen su etiología en diversos factores como el envejecimiento; en algún accidente traumático incluso de la infancia; a causa de tratamientos farmacológicos como el uso crónico de corticoides; la radiación de rayos ultravioletas del sol que también está detrás de casos de cataratas y, además, repasó otros factores como los congénitos o metabólicos. En cuanto a su prevalencia, aunque hay casos entre los 43 y 54 años, lo más habitual es que aparezcan a partir de los 65 y, sobre todo, por encima de los 75, tramo este último que concentra el 70,5% de los casos. En las edades más tempranas, hasta los 65 años, es más frecuente en la mujer;pero, a partir de dichos años, el porcentaje mayor se lo llevan los varones.

En cuanto al tratamiento, el doctor Rábano explicó el phaco emulsificación del cristalino empleo de ultrasonidos para emulsificar el cristalino, una intervención quirúrgica en la que se cambia el cristalino por una lente intraocular para suplir sus funciones.

Poco conocida y muy seria es la degeneración macular asociada a la edad. En el centro de la retina hay una zona que se llama mácula, esencial para la visión porque es el lugar donde se enfoca la imagen. En la degeneración macular esta zona se daña. En Occidente, explicó este especialista, «es la causa de ceguera legal por encima de 65 años». En un estadío inicial, la maculopatía asociada a la edad tiene una prevalencia, «en mayores de 70 años, del 30%». De ellos, el 10% termina por desarrollar un degeneración macular asociada a la edad con diferentes fases desde la atrofia, la neovascularización y, finalmente, la cicatriz fibrosa. Según los datos facilitados por el doctor Rábano, la incidencia es el 40% en la atrófica o seca; del 60% en la húmeda o exudativa, que es la más grave. En España padecen esta patología ocho millones de mayores de 65 años.

Prevención

En cuanto a la prevención, tanto la edad como la predisposición genética no son modificables; pero hay otros factores en los que se puede intervenir, tales como los ambientales, es decir, el tabaco, la obesidad o el sedentarismo y «es aconsejable consumir suplementos como antioxidantes, zinc y luteína». Fundamental es, como en toda patología, «el diagnóstico precoz». En cuanto al tratamiento, «la degeneración macular asociada a la edad seca carece del mismo y, la húmeda, puede resolverse o mejorar con tres inyecciones mensuales anti-VEGF intravítrea». «Son fármacos que selectivamente van a la membrana y muy eficaces sobre todo en el inicio de la enfermedad».

Por último, el doctor Rábano analizó los efectos de la diabetes sobre la vista así como el glaucoma. En el primero, explicó que el edema macular es la principal causa de la pérdida de agudeza visual y recordó que el 8,3% de la población padece esta insuficiencia pancreática. Una enfermedad con un bajo nivel de detección, es decir, que solo la mitad están diagnosticados. El 10% de los mayores de 75 años es diabético y, de ellos, el 25% tiene una retinopatía por tal causa. Como tratamiento, el doctor Rábano destacó el control metabólico; la fotocoagulación Láser Argón y los esteroides intravítreos, además del anti-VEGF y la vitrectomía. Y, otra vez el diagnóstico precoz es la clave.

En cuanto al glaucoma, que es el aumento de la presión del líquido que hay dentro del ojo (humor acuoso); de forma que puede llegar a dañar el nervio óptico de forma irreversible, afecta al 1% de los mayores de 40 años y la genética tiene un importante peso. Su gran peligro es que inicialmente es asintomático. Por ello, es clave controlar la tensión ocular anualmente en los mayores de 40 años y realizar revisiones oculares. En cuanto al tratamiento, este oftalmólogo destacó que con «hipotensores oculares, controlamos el 90 % de los casos» y también, repasó las opciones quirúrgicas y con láser.