Ensalada de solomillo de cerdo

«Antiguamente en los pueblos, en el mío por lo menos, sobre todo en los meses de verano, aunque también en invierno, como no se podía conservar mucho la carne, toda la que se hacía a la brasa y sobraba, se comía la día siguiente en ensalada», explica Yolanda García, natural de la localidad salmantina de Robleda. «Son muy famosas las ensaladas de solomillo, de pollo, de conejo, de todas las cosas que se pueden asar a la lumbre», añade.

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En su caso, tal y como se aprecia en el vídeo que acompaña esta información, el solomillo de cerdo lo ha asado a la lumbre aunque se entiende que esto no está al alcance de todo el mundo y habrá que conformarse con la vitro y la sartén, en la mayor parte de los casos.

Una vez listo, se trocea y como indica Yolanda, «el solomillo tiene que quedar un poco rosado porque con el vinagre que vamos a echar se curte y al día siguiente está blanco».

El aliño es el propio de una ensalada, en este caso se añade al solomillo la cebolla troceada, aceitunas y pimiento. Se termina de arreglar con «un chorro generoso de aceite de oliva y vinagre y al día siguiente, se vuelve a echar aceite y vinagre».

Hay que tener en cuenta que la carne ya lleva sal por lo que conviente probar antes de sazonar.