El desahucio anunciado de las monjas cismáticas de Belorado se aplaza a octubre
La jueza de Briviesca había previsto para la fecha del 12 de septiembre el lanzamiento, tras la sentencia dictada el 1 de agosto en la que se ordenaba el desahucio de las cismáticas de Belorado
Las monjas cismáticas de Belorado siguen respirando tranquilas tras la sentencia de desahucio que la jueza de Briviesca ordenó el pasado 1 de agosto. Tras la decisión de la magistrada solo quedaba que el 12 de septiembre las exmonjas saliesen del cenobio de Santa María la Bretonera.
Sin embargo, esto no va a ocurrir porque, tras la sentencia, los abogados de las exreligiosas tienen 20 días naturales para presentar los recursos necesarios para paralizar, al menos de momento, el lanzamiento. La defensa presentaba hace unos días un primer recurso en la Audiencia Provincial como confirmaron fuentes cercanas a este organismo. La jueza de Briviesca ha decidido que sea el 3 de octubre a las 10.00 horas, según confirma Burgosconecta.
A través del escrito presentado en el órgano judicial se solicitaba la paralización de ese lanzamiento a la espera de la presentación de otro recurso de apelación sobre la sentencia propiamente dicha. No cabe en cualquier caso el lanzamiento, ni una ejecución provisional de la sentencia, hasta que no se cumpla el plazo de 20 días naturales que se certificaría a finales de este mes de septiembre, dado también que el mes de agosto es inhábil a todos los efectos.
Desalojo voluntario o por la fuerza
La sentencia dictada por la jueza de Primera Instancia e Instrucción de Briviesca ordenaba el desalojo voluntario; y si esto no se producía habría de hacerse por la fuerza. La sentencia indica que no han demostrado tener «ni la propiedad del monasterio, ni la propiedad, ni su uso legítimo».
Los días siguientes al pronunciamiento de la magistrada, las cismáticas se llevaron a las cinco religiosas mayores, alguna de ellas con alto grado de incapacidad, desde el monasterio de Belorado al de Orduña previendo su salida inminente de este lugar.
Allí, con ellas, se han trasladado otras tres exmonjas. El caos de los días siguientes demuestra el nerviosismo de las excomulgadas que impidieron a una comisión judicial rescatar a las mayores y llevarlas a otros conventos de la provincia de Burgos, porque son las únicas representantes de la comunidad de Belorado. Entre los abogados y las exreligiosas impidieron que la Federación de Aránzazu se llevara a sus hermanas.
La ubicación de las monjas y exmonjas
Haciendo cuentas, a fecha del lanzamiento previsto por la magistrada de Briviesca, en Belorado quedarían dos exmonjas de las ocho excomulgadas. Tres de las excomulgadas estarían al cuidado de las cinco mayores en Orduña. Las mayores son las que conforman la verdadera comunidad religiosa. Y otras tres excomulgadas atenderían el restaurante de carretera en Arriondas (Asturias).
Precisamente, estas últimas han denunciado ante el juzgado correspondiente que les están envenenando a los perros que crían en esta localidad. Afirman sentirse «perseguidas» en una situación que consideran «profundamente injusta». Denuncian que se intenta atacar sus actividades, boicotear sus proyectos y frenar su proyección emprendedora.
Según su portavoz, Francisco Canals, «ellas se mantienen unidas en la adversidad. Recuerdan que Dios y el tiempo son los mejores jueces y aseguran que actuarán conforme a lo que Dios les indique en estos momentos tan difíciles», transmitía Canals.