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Ureña triunfa en en su reaparición en Arévalo tras el percance de Pamplona. F.G. MURIEL
Ureña desoreja a dos toros de Domingo Hernández y Garcigrande en su triunfal reaparición en Arévalo

Ureña desoreja a dos toros de Domingo Hernández y Garcigrande en su triunfal reaparición en Arévalo

Castella consigue un trofeo en el que abrió festejo y Fortes falló con los aceros, además de ser volteado en el que cerró la corrida

Fernando G. Muriel

ARÉVALO (ÁVILA)

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Lunes, 16 de julio 2018, 10:21

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El torero lorquino Paco Ureña, que en Arévalo volvía tras su cornada en Pamplona, fue el triunfador de la tarde, y de la feria de San Victorino Mártir, al conseguir pareció no resentirse de la pierna herida. Realizó una faena con el astado de Domingo Hernández con encaje y profundidad por ambos pitones. Todo muy ligado y reunido. Mató de estocada hasta la bola.

Ureña se lució a la verónica en el quinto, 'Danzarín' del hierro de garcigrande, un toro que fue premiado por la presidencia con la vuelta al ruedo. Comenzó la faena de muleta con ayudados por alto, que daba inicio a una gran faena con series de naturales. Continuó en el mismo tono con la derecha. Mató de estocada y cortó las orejas.

El francés Sebastián Castella, al igual que Ureña, nuevo en el coso de Bellando, comenzaba bien la tarde con el que abrió el festejo, un toro noble, al que saludó en la faena de muleta con bellos ayudados, antes de tomarla sobre la diestra para torear con gusto y clase. También al natural, donde humilló con buena condición. Mató de estocada baja.

Larguisimo trasteo de Castella al cuarto –del hierro de Domingo Hernández, un toro que se humillaba bajo los trapos. El francés realizó series por las dos manos, aunque más cómodo por la drecha, donde se lució con cambios y adornos. Mató de estocada y dos descabellos, lo que le dejó sin trofeo.

Saúl Jiménez Fortes, recibió al tercero, de Garcigrande, con una larga como prólogo de una faena en la que gustó y supo transmitir su toreo marcado por la pureza, siempre en terrenos comprometidos, jugándosela.  Sus naturales fueron carteles, al igual que los doblones con los que puso fin al trasteo. Mató de estocada defectuosa y tres descabellos.

El sexto y último, también de Garcigrande, apretó en el caballo para protagonizar el piquero la mejor suerte de varas del festejo. Comenzó Fortes doblándose por abajo en pases de castigo para tomar, enseguida, la muleta sobre la diestra y torear con temple. Mejor al natural, donde el toro mostró mejores condiciones por ese pitón. Remató la serie y sufrió una voltereta, saliendo ileso. Tras volver con el toro, cuajó otra buena serie de naturales que fueron muy ovacionados por el público, al igual que el final de faena. Falló con el estoque lo que le impidió ser premiado con alguna oreja.

Arévalo, Feria de San Victorino Mártir. Cuatro Toros de Gracigrande y dos Domingo Hernánez, bien presentados y nobles en general. Destacó el 5º, herrado con el número 80, de nombre Danzarín, premiado con la vuleta al ruedo. Sebastián Castella, oreja y ovación tras aviso; Paco Ureña, dos orejas y dos orejas; Fortes, palmas tras aviso y ovación. Entrada: Media plaza.

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