Profesores de autoescuela se forman para concienciar sobre el riesgo del alcohol y las drogas al volante

Además de aprender las nociones básicas generales para manejar un vehículo, los jóvenes que acudan a las autoescuelas conocerán los efectos del alcohol y otras sustancias al volante.

Para intentar transmitir a los futuros conductores actitudes responsables y preventivas de accidentes de tráfico, que son principal causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 24 años, y tienen lugar fundamentalmente durante las noches de los fines de semana, una quincena de profesores de once escuelas de Zamora se formarán en un taller que tendrá lugar el 15 de mayo en la sede de la CEOE-Cepyme.

Además, a los representantes de cada autoescuela se les facilitará, entre otro material, un simulador informático de conducción ebria, gafas de simulación de estado ebrio, una guía fotográfica de accidentes provocados por el consumo elevado de alcohol y presentaciones en 'powert point' para facilitar el trabajo.

«Aunque la mayor parte de los profesores están ya acostumbrados a dar estos cursos, es bueno unificar criterios y, además, el material es muy bueno», explicó Miguel Rosino, presidente de la Asociación Provincial de Autoescuelas, al término de la reunión que mantuvo con la concejala de Bienestar Social, María José Martínez Velarte.

Rosino destacó la buena acogida que la propuesta ha tenido entre las autoescuelas de Zamora, ya que la mayor parte de ellas estarán presentes en este taller, que se desarrolla en el marco del programa Conduce-té.

Desde la Concejalía de Bienestar Social se subraya que va dirigido específicamente a los profesores de autoescuela «como agentes sociales de primera magnitud para poder concienciar a nuestros jóvenes de lo serio que es llevar un volante entre las mano, y de lo peligroso e irracional que es llevarlo habiendo consumido alcohol y otras sustancias. Nadie mejor que ellos para influir en las conductas y actitudes de los futuros conductores».

Encuentro

Por otra parte, ayer se celebró una nueva reunión sobre el Plan Municipal de Drogodependencias, con la participación de las Concejalías de Bienestar Social, Protección Ciudadana y Juventud, Cultura y Educación; la Subdelegación de Gobierno, con Policía Nacional y Guardia Civil; y el Consejo Local de la Juventud.

En el encuentro se analizaron las actuaciones emprendidas hasta el momento y se plantearán nuevas acciones. Un total de 566 alumnos pertenecientes a nueve centros educativos de la capital han participado este cursos en acciones para reducir el número de accidentes de tráfico relacionados con el consumo de alcohol y de cannabis.

La actividad ha servido, por ejemplo, para incrementar hasta el 87% el número de jóvenes que considera que el alcohol es tan peligroso como otras drogas, una percepción que antes de la iniciativa solo tenía el 66% de los jóvenes. Si sólo el 26% creía a principio de curso que consumir alcohol los fines de semana entraña riesgos para un menor, el porcentaje ha pasado ahora al 50%.

Los talleres han contribuido también a la desaparición de algunos mitos como que el alcohol es un estimulante, ayuda a dormir mejor, aumenta la potencia sexual, que el consumo del cannabis puede controlarse, que es mejor fumar porros que tabaco y que conducir por debajo del límite de alcoholemia permitido no entraña peligro.