Desmantelada en Segovia una red que robaba en iglesias, viviendas y bares

"Con esta gente fuera de circulación, Segovia está más segura". La subdelegada el Gobierno en la provincial, María Teresa Rodrigo, ha alabado esta mañana la labor desarrollada por los efectivos de la Comandancia de la Guardia Civil. El dispositivo desplegado por la Benemérita ha logrado desarticular una banda de ciudadanos españoles a la que se le supone la autoría de al menos 26 robos. Las autoridades acusan a este grupo organizado de haber cometido sustracciones en iglesias, viviendas particulares y establecimientos hosteleros de diversos puntos de la provincia.

La operación 'Brieva' se ha saldado con seis detenidos, cuatro de ellos integrantes de una misma familia y residentes "desde hace algún tiempo" en la localidad segoviana que da nombre al fructífero operativo, según ha desvelado el teniente coronel Juan Miguel Jiménez.

Los arrestados a raíz de la eficiente actuación de la Benemérita segoviana son cinco hombres y una mujer, han explicado las mismas fuentes del Cuerpo Armado. Sus identidades responden a las iniciales R. J. T. S. V., de 25 años de edad; A. T. S. V, de 20; J. T. S., de 45, y la mujer M. P. S. V. R, de 40 años. Todos ellos tenían su domicilio en Brieva, donde fueron detenidos por los agentes de la Guardia Civil. Además, hay otros arrestados en la operación. Se trata de dos varones: D. G. H., vecino de la vecina población de Torrecaballeros, y S. M. S., ambos de 19 años. Estas últimas detenciones se suman a otra de una persona que ya está imputada por este mismo caso y en prisión -J. V. T. S, de 23 años de edad-. Todos tienen antecedentes penales.

Con la cautela lógica de estos casos, el teniente coronel de la Comandancia Provincial de la Benemérita y la subdelegada del Gobierno han coincidido en afirmar que la operación llevada a cabo ha permitido esclarecer 18 robos cometidos en pequeñas iglesias y ermitas de diversas localidades entre enero y marzo del ejercicio en curso. La Diócesis de Segovia ya denunció a comienzos del año la oleada de sustracciones de la que estaban siendo víctimas muchas parroquias de pequeños pueblos, emplazados sobre todo en el piedemonte serrano.

María Teresa Rodrigo ha especificado que los ladrones se dedicaban a forzar los cajetines donde se guardaban las exiguas recaudaciones de los cepillos, por lo que las cantidades en dinero contante y sonante con las que se hacían en cada motín no eran muy elevadas y como mucho llegaban a los 80 euros.

En la extensa lista proporcionada por la Subdelegación del Gobierno en Segovia de delitos en los que supuestamente están implicados los detenidos están los delitos cometidos en los templos de Escarabajosa de Cabezas; Santo Domingo de Pirón; Tenzuela; Tizneros; en los dos del término municipal de Basardilla; en Adrada de Pirón; en la iglesia y ermita de La Cuesta; Caballar; La Higuera; Bernuy de Porreros; Tizneros; Torreiglesias; Valle de San Pedro; El Cubillo; en la parroquia de Torre Val de San Pedro; Pelayos del Arroyo; La Salceda; Navas de Riofrío, y Zarzuela del Monte. La mayoría de estas sustracciones se concentraron en el mes de enero, aunque los ladrones también actuaron en febrero y marzo de manera más esporádica.

En cuanto al modo de actuar, la banda usaba la fuerza para acceder a sus objetivos. Los ladrones rompían las cerraduras, destrozaban las puertas o ventanas para entrar y revolvían los armarios incluso en las sacristías hasta encontrar lo que buscaban, que no es otra cosa que dinero. Les da igual abrir sagrarios que cajones. Una vez conseguido el botín huían en busca de al siguiente parroquia. A veces no recorrían más de diez kilómetros y asaltaban, o al menos lo intentan, la iglesia de la población con feligresía más próxima en la ruta.

El teniente coronel Juan Miguel Jiménez señala que no se descarta que este grupo delictivo esté detrás del último robo cometido en la iglesia de Moral de Hornuez, donde la semana pasada sustrajeron el sagrario de la parroquia. Las investigaciones están en marcha, aunque en un principio no se ha hallado vinculación que ligue a los arrestados a este suceso.

Los arrestados son también los presuntos autores de continuados delitos de amenazas y coacciones a otras personas, a las que reclamaban dinero a cambio de implicarles en hechos delicitivos, prosiguen representantes de la Subdelegación.

En el historial de la banda también figuran robos de básculas en Valseca, Trescasas y Zarzuela del Monte entre junio de 2010 y el pasado enero, así como asaltos a un domicilio en Adrada de Pirón y sustracciones cometidas en establecimientos hosteleros de las localidades de Los Huertos y Espirdo.

Dentro de la operación 'Brieva', la Guardia Civil se ha incautado de diverso material y herramientas empleadas por los delincuentes para realizar esos robos con fuerza y acceder a los lugares que habían escogido como objetivo de sus fechorías. Los agentes también ha recuperado dos ordenadores portátiles y otros dos de sobremesa; dos televisores; un subfusil inutilizado, una pistola simulada, dinero en metálico, dos cadenas musicales, relojes, prismáticos, y alguna antigüedad, así como un libro de misas. Los efectos ya han sido identificados por los propietarios.

Los tentáculos de la banda también alcanzaban el narcotráfico. Y es que los arrestados están acusados de un supuesto delito de tráfico estupefacientes. En el registro del domicilio de Brieva, los guardias hallaron 30 plantas de marihuana y un completo sistema de cultivo de la 'hierba'.