Valladolid

La calle Estación se libra de la señal del corte inexistente pero no de las obras

Los operarios trabajan ahora en la urbanización de la calle García Valladolid, una pequeña vía perpendicular a Estación que la conecta con Independencia, que mantiene cortados precisamente los dos carriles de entrada a la misma de Estación, desde Colón, por un lado, y desde Ferrocarril, por otro. Estos dos viales secundarios, que en nada afectan al grueso de la circulación por la calle Estación, permanecerán cerrados, en principio, hasta finales de noviembre, cuando está prevista la reapertura de García Valladolid.

En cuanto a la señal obsoleta que permanecía hasta ahora en la entrada de Estación, el poste ha sido retirado de la acera y tapado el pequeño agujero para evitar confusiones. Dichos paneles, que durante meses habían permanecido tapados, quedaron al descubierto al romperse los plásticos negros que los cubrían y durante, al menos, toda la semana pasada mostraban, uno de ellos, el corte completo de la calle Estación que se llevó a cabo en noviembre de hace dos años por las obras del doble túnel bajo las vías de Estación y Panaderos. Y el otro, el que informaba del corte de Panaderos y del desvío por Ferrocarril, hacía alusión también a las obras del doble túnel -abierto a la circulación el 4 de agosto de 2024-.

La calle Estación, salvo por el citado corte aún vigente de los dos viales hacia García Valladolid, recuperó la normalidad en toda su extensión el pasado 2 de julio, cuando se reabrió el tramo que permanecía cerrado también desde hacía meses entre San Luis y Padre Claret, motivado por las obras no del doble túnel sino del paso peatonal que el 7 de agosto une Delicias (calle Guipúzcoa) con la Circular (Estación y Padre Claret). Y en cuanto a Panaderos, esta vía solo cuenta ahora con un vial de salida hacia Estación, al margen de la boca del túnel que conduce a Delicias (avenida de Segovia); mientras que Ferrocarril fue modificada el pasado verano para suprimir la hilera de aparcamientos y cuenta ahora con un solo vial de salida hacia Estación.

Los conductores, no obstante, tienen prohibido desde comienzos del mes de agosto el acceso a la calle García Valladolid por los dos carriles cortados en Estación. Allí trabajan desde entonces los operarios para darle un lavado de cara completo a una pequeña vía que mantenía aún buena parte de sus dos aceras de brea y hormigón, una rareza en el centro. Las obras incluyen el adoquinado de las aceras -una de ellas, la del lado de los números impares, ya está abierta al tránsito peatonal- y la renovación de las redes subterráneas del lado de los números pares, donde trabajan los obreros estos días para cubrir las zanjas abiertas y comenzar también allí con el adoquinado y el posterior asfaltado de la calzada, que mantendrá el sentido de circulación desde Estación hacia Independencia. El plazo de ejecución de los trabajos concluirá el próximo 29 de noviembre.

De manera que para entonces, antes, en cualquier caso, de fin de año, la calle Estación recuperará por completo la normalidad con la reapertura al tráfico de la calle García Valladolid y de los dos viales de acceso a la misma. Y no es una cuestión menor, sobre todo, para los vecinos del entorno, a los que se abrió el pasado verano un circuito de circulación para acceder y salir de sus vados desde Ferrocarril por Estación hacia García Valladolid e Independencia.

La calle García Valladolid, de hecho, tenía hasta entonces un sentido de circulación inverso, de salida a Estación, que se modificó entonces en el marco de las obras de supresión de los aparcamiento en Ferrocarril, donde se duplicó el ancho de la acera del lado de los números impares, según justificó entonces el Ayuntamiento, para ganar agilidad en la circulación. Aquella intervención ha conllevado algunas quejas de vecinos y comerciantes de Ferrocarril al impedir las labores de carga y descarga con la supresión de los estacionamiento y motivar que algunos transportistas paren sus vehículos directamente sobre la acera -algo evidentemente sancionable-.