La estación de Valladolid despierta el interés de 32 grandes constructoras del país

Además hay otra empresa castellana y leonesa que opta a conseguir la adjudicación. Se trata de la salmantina Martín Holgado Obra Civil, que ha establecido una UTE con Ortiz Construcciones, Rubau y Vilor Infraestructuras.

Los 253 millones de euros de presupuesto base de licitación para construir la estación han provocado el interés empresarial en toda España. Así, en el listado aparecen Dragados y Sacyr (en una UTE con Tecsa), Puentes y Calzadas, Ferrovial… Prácticamente el 100% de las empresas son enormes maquinarias con décadas de experiencia en este tipo de obras, con algunas de ellas especializadas incluso en asuntos ferroviarios.

El 28 de abril era la fecha en que se debían abrir los sobre con la oferta técnica. Es uno de los dos aspectos que se baremarán. De hecho, el técnico tiene una ponderación del 49%, mientras que se concede un 51% a la oferta económica. Esas ofertas se conocerán este mismo mes, el día 28 de mayo, que es cuando está fijada la fecha de apertura de los sobres en un acto privado.

Una vez abiertos todos los sobres comienza el proceso de adjudicación, que se puede demorar unos meses por dos motivos. Primero, por la complejidad. Segundo, por el elevado número de empresas aspirantes, que puede provocar recursos cuando se dirima qué unión temporal de empresas resulta elegida para rubricar el contrato.

Cuando ese trámite burocrático concluya, se formalizará el contrato, lo que puede tardar aún un mes más. Y acto seguido comenzarán los trabajos de construcción de la estación de trenes.

El contrato tiene un plazo de ejecución de 43 meses. Las previsiones del ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, incluían comenzar las obras en torno al mes de octubre de 2025. Un plazo que según las fuentes consultadas en su momento parecía razonable dada la dificultad del concurso. Esto quiere decir que la estación de trenes estaría lista para operar al 100% de su capacidad en mayo de 2029.

Según ha podido saber El Norte, el Ayuntamiento de Valladolid ya ha presentado un escrito de interposición del recurso contencioso-administrativo ante la Audiencia Nacional, siguiendo las instrucciones del informe elaborado por el bufete Jiménez de Cisneros, contratado por el Ayuntamiento en agosto de 2024. Esto significa que se inicia un proceso que debe continuar con la reclamación del expediente a Adif, antes de dar el plazo para «deducir demanda». Son los primeros pasos de un procedimiento en el que el Ayuntamiento reclama que hace falta un Plan Especial para los usos relacionados con equipamientos comerciales y aparcamiento que se incluyen en el nuevo edificio de la estación de trenes de Valladolid.

El Ayuntamiento no pedirá medidas cautelares, por lo que este procedimiento no debería entorpecer el proceso de adjudicación de las obras. Sí puede hacer, si se aceptan las tesis municipales, que la parte estatal deba diseñar ese Plan Especial, que después se tramitaría en el Consistorio.

La estación de Valladolid se ha convertido ya en un nudo estratégico para el transporte de pasajeros. A tal punto que se han superado los cinco millones de viajeros anuales, lo que hace imposible calcular el impacto que puede tener en la línea la entrada en servicio de la U de Olmedo (mediados de 2027), la Y vasca (antes de 2030), la alta velocidad hasta Santander (2029, al menos parcialmente) y la consiguiente liberalización ferroviaria del norte de España, que permitirá la expansión de operadores como Iryo y Ouigo.

A esto hay que añadir que a mediados de este mes dejarán de circular los trenes de Renault por la línea de Ariza y se desviarán por la Variante de Mercancías. Eso permitirá iniciar el desmontaje de la vieja vía férrea para poder concluir el viaducto de los Trampsoso y eliminar del todo, hacia el primer semestre de 2026, el paso de mercancías por la capital.