Huye de un siniestro y amenaza con un cuchillo a sus padres para que no le delaten en Valladolid

Veinte minutos separaron en la madrugada de ayer dos aparatosos siniestros casi calcados registrados en las plazas de la Circular (4:00 horas) y de Caño Argales (4:20). Los conductores de dos coches empotraron sus respectivos vehículos contra sendos semáforos. El primero acabó detenido en su domicilio de Pajarillos después de protagonizar una rocambolesca huida del lugar del siniestro y el segundo quintuplicó con creces la tasa legal de alcoholemia, según informaron ayer fuentes de la Policía Municipal.

El accidente más aparatoso tuvo lugar en la esquina de la Circular con el paseo de San Isidro, cuando el conductor se un Audi A-3 se subió a la acera al ir a girar hacia el túnel, destrozó la valla de protección y acabó empotrado contra el semáforo. Los testigos que alertaron al 092-091 vieron cómo el piloto se bajaba y salía corriendo hacia Pajarillos. Los agente comprobaron el domicilio del propietario y se presentaron en su casa, en dicho barrio, poco después. Allí también un grupo de testigos vieron acceder al portal a un joven con las mismas características.

El padre del sospechoso abrió la puerta y los policías vieron cómo el chico estaba amenazando en el interior a su madre con un cuchillo para que no le delataran. Así que decidieron entrar, redujeron al joven y le detuvieron, en principio, por un delito de amenazas graves en el ámbito familiar. El chico, de 24 años, alegó entonces que le habían sustraído el coche esa misma noche, si bien no había presentado denuncia.

«No se le pudo practicar la prueba de alcoholemia al haber transcurrido mucho tiempo, pero en su momento también se le imputará el accidente para que se haga cargo de la reparación del mobiliario», explicaron las fuentes del 092 consultadas.

Los mismos agentes intervinieron casi en paralelo en un accidente idéntico en la esquina de Panaderos con Caño Argales. El conductor, en este caso de un Megane, no huyó y arrojó una tasa de alcohol de 1,30 miligramos por litro de aire espirado el límite es de 0,25, por lo que fue imputado por un delito contra la seguridad vial.