La procesión del Cristo de las Injurias de Zamora dura dos horas menos

Bajo la constante amenaza de la lluvia, 2.300 cofrades de la Real Hermandad del Santísimo Cristo de las Injurias, reunidos en el atrio y la plaza de la Catedral, escucharon la ofrenda del silencio pronunciada por la alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón.

La procesión salió, si bien fue recortada en dos tercios dejando la marcha en una hora escasa y a tiempo para poder disfrutar de la final de la Copa del Rey. Valdeón citó las palabras del pregonero, el cardenal arzobispo emérito de Sevilla, Carlos Amigo, para asegurar que la sociedad llega a esta Semana Santa «con los pies descalzos de prejuicios, los brazos abiertos y las puertas del corazón franqueadas».