Sube la fiebre por los ventiladores en Segovia

La mayoría de las casas segovianas no están preparadas para afrontar un calor extremo, aunque cada vez es más habitual ver algunos condensadores del aire acondicionado en las fachadas de los bloques de pisos. El coste medio de estas instalaciones para un inmueble está en torno a los 2.300 euros, pudiendo oscilar entre los 800 y los 5.000 euros.

El elevado precio que supone para los hogares de una provincia donde su utilización normalmente está en torno a treinta días al año, a lo que hay que añadir el alto coste de la luz, provoca que muchos desistan de esta opción y busquen otras alternativas más asequibles.

Continuando con el refranero popular, 'solo nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena', por lo que muchos segovianos acuden a las tiendas de electrodomésticos cuando el calor aprieta, es decir, a partir de finales de la segunda quincena de junio que es cuando los termómetros se han disparado en esta temporada.

En una calurosa tarde del mes de julio, cuando en la calle se sobrepasan los 30 grados, en Bayón Multicentro una pareja se acerca al mostrador a preguntar por las prestaciones y el precio de los ventiladores de aire frío, aunque finalmente no se deciden y prefieren esperar. Carmen Bayón indica que «en estos días se nota que la gente pregunta más, aunque a veces es algo puntual, ya que en cuanto refresca un poco se para el goteo de clientes». Actualmente hay existencias, pero algunos modelos ya no tienen disponibilidad en stock.

En esta misma línea se pronuncia Martín Sierra, de Masigal, que destaca que «al venir el calor de golpe se han generado problemas de suministros y no hay todos los ventiladores que nos gustaría, pero los fabricantes van reponiendo, incluso se han enviado de alguna marca concreta desde Alemania porque allí tenían stock disponible», apunta este empresario.

Las elevadas temperaturas han hecho que la demanda sea muy fuerte. Martín Sierra indica que «está siendo una locura porque ha habido un aumento muy importante provocado porque el calor se está prolongando durante varios días y cuando la gente no puede dormir durante cuatro o cinco noches, acuden a la tienda».

Aunque el ventilador de aire frío o climatizador ya lleva funcionando varios años, últimamente se han incorporado algunas novedades. Como indica Carmen Bayón. «algunos son portátiles y no necesitan instalación, mientras que anteriormente llevaban una serie de tubos que había que colocar y sacar al exterior de la vivienda o el local, por lo que la gente era más reacia a comprarlos», relata. Para que funcione correctamente se echa agua y hielo en el recipiente por lo que el aire que sale hace que se mantenga el ambiente más fresco que con un ventilador convencional que solo remueve el aire caliente de la estancia. El precio oscila entre los 24 euros y los 80 a los que puede llegar un climatizador.

En Masigal inciden en que «la gente busca ventiladores de calidad y que sean silenciosos para poder llevarlo por la noche a la habitación porque el mayor problema es conciliar el sueño». El coste varía entre los 19 euros del más básico a los 250 euros de ventiladores de flujo variable que generan una brisa de aire suave para no resecar al ambiente y que provoquen una sensación de alivio. En este establecimiento también instalan ventiladores de aspa en el techo que se suman a los modelos ya citados y a los de aire frío, que en este caso también han experimentado un incremento de ventas.

En cuanto al perfil del público que compra los ventiladores es muy variado, pero fundamentalmente suele ser gente mayor por la sensación de agobio que sienten con el calor sofocante en las casas.