Los dueños de la granja de ocas situada en la zona de protección: «Nadie nos ha dicho nada»
Afirman que tan solo les han indicado que las aves deben permanecer confinadas
Recibieron la notificación de tener las ocas encerradas, pero desde entonces la empresa El Ejidillo Viveros Integrales, de Valdesimonte, no ha vuelto a tener conocimiento ... de nada más. Es una de las cuatro explotaciones dentro de la zona de protección establecida por la Consejería de Agricultura y Ganadería en un radio de 10 kilómetros de la explotación de Fuenterrebollo en la que se detectó un foco de influenza aviar. «No sabemos por cuánto tiempo, no está confirmado , no sabemos ni tan siquiera si estamos dentro del perímetro de control, nadie nos ha dicho nada, solo que teníamos que encerrarlas y así lo hemos hecho. No sabemos nada más», apunta Marta Calvo, de El Ejidillo Viveros Integrales.
En cualquier caso, esta medida tampoco les ha supuesto un excesivo trastorno. «Vendemos plantas y, en segundo plano, tenemos esta pequeña explotación de ocas, en extensivo». Para esta empresaria, era algo «romántico, nos molaba tener ocas entre los cultivos, pastando». La gripe no supone un inconveniente muy grande. «Tampoco nadie nos ha comunicado que no podamos vender huevos. Solo que tenían que estar encerradas, confinadas, pero de huevos nadie nos ha dicho nada, no hemos recibido ninguna notificación, nadie nos ha confirmado que no podamos vender huevos».
Como las ocas ya están encerradas, de momento no es elevado su grado de preocupación. «Tenemos una cantidad pequeña comparada con otras explotaciones de aves». Desconocen cuánto se puede alargar esta situación. «Nos dijeron que no sabían cuánto tiempo, que ya nos avisarían cuando tuvieran más información. Nuestras ocas están en extensivo, al aire libre todo el día y nos interesaba saberlo cuanto antes para volver a retomar la rutina que tienen».
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