Los ciclistas se rebelan contra las restricciones que se les impone en el Parque de Guadarrama
«Si no nos quieren en la sierra, nos van a tener en la calle, porque nos vamos a movilizar»
«Los que estamos aquí representamos un colectivo comprometido con el medio ambiente, con la conservación del patrimonio cultural, material e inmaterial, de Segovia. Además, somos defensores de la protección de la sierra de Guadarrama y entendemos que tenga que existir una regulación del uso, pero basada en informes objetivos y serios. Hasta la fecha, no existe informe negativo alguno acerca del uso de la bicicleta de montaña en la sierra».
Representantes de más de quince clubes y asociaciones ciclistas de la provincia protestaron ayer ante la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León contra las restricciones que prevé el Plan Rector de Usos y Gestión (PRUG) del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. El enfado de los aficionados a esta disciplina que combina deporte y naturaleza es mayúsculo «porque el plan solo nos permite utilizar unas pistas asfaltadas que no representan ni el 10% de lo que ahora tenemos y que deberemos compartir con senderistas y caballistas», en palabras de María Antonia Jordán, del Club Ciclista Las Kamelias. «Imaginemos una pista de menos de tres metros de ancho por la que constantemente suben ciclistas, senderistas con sus familiares y sus perros y varios caballos. Será el caos», añadió.
Los aficionados al ciclismo de montaña leyeron públicamente el escrito que después elevaron al delegado territorial, documento en el que solicitan a la Administración que valore y acepte las alegaciones al PRUG que presentaron el pasado 27 de febrero, pues consideran que el plan establece «sin consenso ni criterio» unas restricciones «arbitrarias» y «excesivas» al uso de la bicicleta.