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La plaza de Juan XXIII, llena de participantes en la cadena humana.

El aro azul de la concienciación

Cientos de personas participan en esta actividad organizada desde las redes sociales por padres de niños diabéticos

Cecilia Hernández

Lunes, 9 de noviembre 2015, 12:00

«Hace poco tiempo cualquiera que viera el círculo azul no sabía qué significaba, pero hoy ya muchos saben que el nuestro símbolo, el de la diabetes». Belén Bernal es la presidenta de la Asociación Diabetolótica Salmantina y no podía ocultar su alegría por la gran respuesta que obtuvo la cadena humana del movimiento Trasndiabetes, que se celebró ayer en las calles del centro de la ciudad. Una acción necesaria «para visibilizar a la diabetes y a sus afectados» que se enmarca en la semana de actos por el día mundial de esta enfermedad que tendrá lugar el próximo 14 de noviembre.

Este movimiento Transdiabetes surgió de las redes sociales, en concreto de un grupo de Facebook llamado Noches sin dormir, en el que los padres de niños con diabetes comparten sus inquietudes, problemas y la vida diaria de sus hijos. «Son las noches sin dormir por temor a que a tu hijo le dé una hipoglucemia», añade Belén Bernal, cuya asociación se puso al lado de Laura García, una de esas madres que acumulan ojeras y preocupaciones, e impulsora y organizadora de la cadena humana de ayer.

Cadena que, desde la Plaza Mayor, llegó a la Catedral, donde el atleta con diabetes tipo 1, Casimiro Blanco, subió a Ieronimus. En la terraza de la Torre Mocha, Blanco recibió un aro azul, símbolo de esta lucha, de manos de una pequeña de tres años, también enferma de diabetes. Para finalizar todos los participantes pasaron por debajo de un gran aro instalado en la plaza Juan XXIII, a los pies de la Catedral.

«Tenemos que luchar porque se nos conozca, hacernos visibles en la sociedad y que se respeten nuestros derechos», explica la presidenta Bernal para justificar estas actividades. Derechos que en el caso de los enfermos más pequeños pasan porque en los colegios haya personal especializado que pueda inyectar la insulina. O, ya de modo general, que se tenga en cuenta las necesidades de los diabéticos para que no se vean afectados por las listas de espera en las consultas médicas.

En estas tareas se implica la Asociación Diabetológica Salmantina que, en los próximos días, organizará nuevas actividades para hacerse presente en la sociedad. Por ejemplo, los días 14 y 15 volverá la carpa a la plaza del Liceo, instalación en la que se ofrecerá información sobre la diabetes y se invitará a todo el que quiera a realizarse una prueba para conocer allí mismo su índice de glucemia. Esos resultados pueden ser el primer aviso de la enfermedad, recuerdan desde la asociación, por lo que conviene que todo el mundo se los realice con cierta frecuencia.

Asimismo, la doctora Francisca Manzano Recio ofrecerá una charla en el centro municipal Julián Sánchez El Charro el viernes, 13 de noviembre. Y desde ese día hasta el domingo la fachada del Ayuntamiento se iluminará de azul en recuerdo de los afectados por esta enfermedad.

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