'Viva Santo Toribio', este año desde los balcones del barrio del Cristo

'Viva Santo Toribio'. En esta ocasión, no se escuchará este grito entre las calles llenas de vecinos del barrio del Cristo, ni durante la orquesta los días de fiesta. No habrá pañuelos ni tampoco se lanzará 'pan y quesillo'. Este jueves, 16 de abril, es Santo Toribio, patrón del barrio del Cristo, pero no habrá verbenas ni celebraciones. Hace un mes decidió la asociación de vecinos del Cristo, de manera conjunta con el Ayuntamiento de Palencia, la suspensión de las fiestas de Santo Toribio por la crisis sanitaria derivada del coronavirus. «Lo suspendimos con tiempo porque veíamos venir esto y para evitarnos trabajo y, sobre todo, pagos. Lo teníamos todo a falta de cerrar. Las orquestas, los pañuelos, las bolsas del pan y quesillo, la romería que organizamos con el Ayuntamiento... Para evitar trastornos con proveedores nos adelantamos un poco y nos alegramos de haberlo hecho», reconoce Guillermo Barrios, presidente de la asociación de vecinos del Cristo.

Pero que no se pueda celebrar en sus calles, no quiere decir que no se pueda celebrar. Ha habido un movimiento a través de redes sociales y de grupos de 'whatsapp' para que a las 13:00 horas, día de Santo Toribio, los vecinos disfruten, cada uno en su balcón, del pan y quesillo. Y, a la vez, desde la asociación, se está promoviendo que el domingo también se ocupen los balcones a la misma hora –13:00 horas– con un trozo de pan y otro de queso en honor de Santo Toribio, y en recuerdo de la pedrea que este año no se va a poder llevar a cabo.

«Queremos salir al balcón a gritar un 'Viva Santo Toribio' con un trozo de pan y de quesillo. Dentro de nuestras posibilidades y de lo que nos permite la situación, pues mantener viva la tradición en la medida de lo posible», señala Guillermo Barrios, que ya tuvo que posponer, junto al resto de la junta directiva de la asociación, la pedrea del año pasado por la celebración de las elecciones. En otra ocasión tuvo que retrasarse por las intensas lluvias, pero finalmente se terminó festejando. «Desde 1976 que se celebra así, es la primera vez que tiene que suspenderse», afirma Barrios.

La cita contará con música, no la de orquestas, pero sí la de los balcones. Varios vecinos sacarán unos altavoces –un dj, una profesora de zumba con un equipo grande...– para que las viviendas más cercanas también tengan un poco de ambiente festivo. «Estamos haciendo todo lo posible dentro de nuestras posibilidades», argumentó Guillermo Barrios.